Durante la clase inaugural que dictó en la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la UCSC, el ex ministro valoró el debate que existe sobre la productividad regional y el esfuerzo de la casa de estudios por tomar conciencia de las necesidades de la zona.
“Que las regiones puedan definir su futuro productivo es vital para el resurgimiento económico del país”, aseguró el economista Andrés Velasco durante su exposición en la clase inaugural de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, El desafío de la política económica para América Latina, ¿hacia una nueva crisis?
Durante su paso por la casa de estudios, el ex ministro valoró que en la Región del Biobío esté abierto el debate en dichos términos: “Es el desafío clave para esta Región en el largo plazo, y celebró que se dé este debate, porque a veces la discusión se centra entre Santiago y regiones, lo que es muy válido, pero finalmente son ellas mismas las llamadas a definir su futuro productivo de forma democrática, razonada y muy bien pensada”, enfatizó.
Es en este punto donde -a su juicio- debe converger el mundo académico más el mundo público y el del emprendimiento. “En la Región del Biobío se está dando un vuelco importante porque se han cambiado los términos del debate, el intendente le ha dado el énfasis que el tema merece, hay una mesa público-privada y se están planteando muchas interrogantes, lo importante ahora es precisar las respuestas”, dijo.
En ese sentido, recordó que esta Región fue “la más industrial de Chile por décadas. Pero que fue un modelo que tocó techo y algunos de esos sectores productivos ya no están, como el textil y el del calzado. Por eso ahora la pregunta es ¿qué sector que provea empleos estables los va a reemplazar?”.
Por eso planteó que lo principal es saber exactamente qué se necesita del Gobierno, de los profesionales y de los técnicos para mejorar.
La triple hélice
La triple hélice es una descripción de un modelo económico en el cual confluyen el Gobierno, la empresa y las universidades, con el fin de lograr un proyecto común que beneficie la investigación y el desarrollo. En esa línea, para Velasco el Estado es el principal encargado de coordinar las acciones y promover el diálogo. “El Gobierno tiene que proveer financiamiento, pero no se puede esperar que todos los aportes para investigación y desarrollo vengan de ahí. Las grandes empresas deben invertir, y al contrario de lo que sucede en países desarrollados, aquí apenas un tercio de las empresas invierte en esto”, criticó.
En otra arista, el ex ministro entrega una visión favorable hacia el Gobierno considerando que una de sus labores es proveer los insumos públicos necesarios para el desarrollo económico, como los son las carreteras, puertos, aeropuertos, entre otros. “Debemos considerar que Chile no sería exportador de cordero a Europa si no hubiese un organismo público que certificara la calidad de los mataderos, o no podríamos exportar fruta si no tuviéramos una institucionalidad pública que certificara que va libre de plagas”, destacó.
Dar valor agregado a las materias primas también es algo que requiere mayor desarrollo, y es ahí donde estaría el aporte a la innovación de las universidades a través de la investigación. “Chile tiene, por ejemplo, grandes posibilidades en la pesca o en la ganadería, pero quizás podría transformarse en un productor de vacunas para los peces o para el ganado, pasando así al área de la biotecnología”, propone.
De todas maneras, para el economista el crecimiento puede darse por el valor agregado en una materia prima, pero asegura que no es la única forma. “Si estás en el sector forestal puedes desarrollar una mesa o una silla, ojalá con diseño y cierta estética, pero quizás puedas agregar valor no necesariamente por tratar la madera, ya que puede que el día de mañana desarrolles una herramienta que se usa en ese sector u otros. La verdad, no tiene mucho sentido tratar de dar respuestas cocinadas a preguntas donde la realidad es muy cambiante”.
Con las universidades
Para Andrés Velasco, la conjugación en esta triple hélice es fundamental. “En el mundo de la empresas se producen ideas prácticas y en las universidades ideas más conceptuales, el desafío es hacer la unión entre esos dos tipos de idea”, asegura.
En esa línea, plantea que no es casualidad que el desarrollo digital se haya dado en California, en un lugar donde existen grandes universidades, o que la biotecnología haya proliferado en una parte de Inglaterra con una realidad similar y que son líderes en esta materia.
Aunque es algo que en Chile aún está en su primera etapa, Velasco asegura que la Región tiene gran ventaja. “Hay excelentes universidades, hay una tradición de diálogo con los sectores productivos y aunque el emprendedor y el académico se puedan ver como dos personas muy disímiles que antes no conversaban, hoy tienen que empezar a hacerlo”.
En ese aspecto, para él es fundamental la labor que realiza la Universidad Católica de la Santísima Concepción. “Me parece destacable el esfuerzo que hacen por atraer y formar jóvenes que vienen de los sectores más vulnerables, además tiene orientación regional y está consciente de sus propias necesidades, hay cierto orgullo y eso se nota”.
Por eso, el economista ve grandes posibilidades en esta zona. “Soy un convencido de que esta Región tiene un potencial enorme, tiene una historia y un capital humano tremendo, universidades de clase mundial, recursos naturales y todo para mejorar su economía, sólo deben redifinir su futuro productivo”, concluyó.