La OPS reportó un drástico aumento de casos de dengue en América Latina y el Caribe, mientras Chile se enfrenta a la presencia del mosquito transmisor. Expertas de la UCSC instan a informar a la población y a tomar medidas preventivas para contener el avance de la enfermedad.
Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), alrededor de mil muertes y más de 3,5 millones de casos de dengue se habían registrado en América Latina y el Caribe durante el primer trimestre del 2024.
Estas cifras, explicó el director de la OPS, Jarbas Barbosa, representan tres veces más casos que los reportados para esta misma fecha en 2023, año en que hubo un récord de notificados en la región, con más de 4,5 millones de contagios.
Los países más afectados actualmente son Brasil, Paraguay y Argentina, que concentran el 92% de los casos y 87% de las muertes.
¿Qué sucede en Chile? De acuerdo con el último Boletín Epidemiológico de Arbovirus, registra 115 casos importados (contagios que se notificaron en el país, pero se contagiaron en otro) y 25 casos autóctonos (cuando el mosquito “pica” en el mismo país).
Los casos autóctonos se concentran en Isla de Pascua, aunque la presencia del mosquito ha sido detectada también en el norte, donde actualmente se mantiene alerta sanitaria.
Cómo se transmite la enfermedad
El dengue es una enfermedad viral transmitida por la picadura del mosquito Aedes Aegypti, que también es vector de otros virus que causan enfermedades graves, como el zika, la fiebre amarilla y la fiebre chikungunya.
Este mosquito puede infectarse al picar a un enfermo de dengue sintomático o asintomático, y adquirir de esta forma el virus de por vida, quedando con potencial para transmitirlo a personas sanas por una picadura.
Tania Grant, médico veterinaria y miembro del grupo Prosalud, de la Facultad de Medicina de la Universidad Católica de la Santísima Concepción, señala que este mosquito está presente en el continente por las condiciones climáticas tropicales y subtropicales de algunas zonas, las que permiten su asentamiento y reproducción. “Pero factores como el Fenómeno del Niño y el cambio climático, que ha generado intensas y cortas lluvias y alzas en las temperaturas, han ido potenciado condiciones para favorecer el desarrollo del Aedes Aegypti, con el riesgo de que pueda aparecer en lugares donde antes no se encontraba”, agrega.
Ximena Ocampo, bioquímica y académica de la Facultad de Medicina de la UCSC, indica que esas condiciones han posibilitado un desplazamiento del vector que propaga el virus que produce esta enfermedad a latitudes donde antes se presentaban brotes esporádicos, y las cifras de casos de dengue era muy inferiores a las que se observan actualmente.
Por ello, añade la académica Tania Grant “es muy importante potenciar una vigilancia activa en todo el país y mantener informada a la población de esta enfermedad”.
Asimismo, recalca la profesora Ocampos, es fundamental la implementación de medidas y acciones sanitarias enfocadas en la contención y eliminación de este vector y de sus fuentes de propagación. “Por ejemplo, recipientes o contenedores de agua dulce retenida donde el mosquito anida y completa su ciclo biológico. Al interrumpir el ciclo replicativo, se entorpece también la cadena de transmisión de esta enfermedad y, por ende, se reducen las probabilidades de que se desarrollen casos autóctonos”.
Recomendaciones
Las expertas explican que los síntomas de la enfermedad son variables, y que pueden presentarse como manifestaciones leves hasta casos graves, dependiendo de la condición inmunológica de la persona. Estos aparecen entre cuatro a 10 días después de la picadura del mosquito infectado con el virus. “Suele existir fiebre elevada, cercana a los 40 grados, acompañada de la aparición de manchas rojas (exantema), dolor de cabeza y musculares, vómitos, náuseas y fatiga”, explica Ximena Ocampo.
En cuadros graves, agrega la experta, puede presentar sangrado de mucosas, acumulación de líquido en los pulmones y dificultad para respirar.
Reconociendo estos síntomas y con el antecedente de haber estado expuesto a la picadura del mosquito en alguna zona endémica, la persona debe consultar al médico rápidamente y así evitar las complicaciones. El diagnóstico oportuno puede prevenir complicaciones o agravamiento de esta enfermedad. “Se ha observado que los síntomas más complejos aparecen una vez que la fiebre comienza a descender, por eso la importancia de monitorearlos”, enfatizó la bioquímica de la UCSC, sobre todo, indicó, “porque actualmente no existe un tratamiento específico para el dengue”.