Un grupo de profesionales de distintos ámbitos se unió para ir más allá de sus deberes cotidianos y jugársela para luchar contra el coronavirus. Aportan a esta causa con su tiempo, conocimientos, experiencia y redes de contacto con un solo objetivo: salvar vidas.
Un grupo de profesionales, proveniente de distintas áreas del saber y la mayoría de Concepción, hace más de un mes optó por aportar en esta crisis sanitaria con investigación, proyecciones y opciones de manejo de la pandemia.
Se trata del Comité Científico Covid-19 Región del Biobío que está compuesto por médicos, matemáticos, investigadores, sociólogos, genetistas, académicos, periodistas, empresarios, abogados, estadísticos e innovadores tecnológicos.
El coordinador de esta iniciativa es el traumatólogo Fredy Montoya. Cuenta que la idea surgió hace un par de meses de una conversación con Germán Acuña, presidente del Colegio Médico penquista, quien también es parte del comité.
Como ellos, otros profesionales se fueron sumando a su idea, integrando nuevos conocimientos que les permitieron tener una visión multidisciplinaria de la crisis. Desde esa mirada quieren ayudar a las autoridades locales y a la mesa asesora nacional a gestionar esta pandemia de la mejor manera.
Entre sus miembros está el ingeniero civil matemático y Dr. en Ciencias Aplicadas, Camilo Mejías, que en el marco de este comité lidera a matemáticos de distintas universidades, a los que se suma su equipo de Hibring Ingeniería. Este grupo elabora minutas y simulaciones que grafican y explican la realidad de la crisis sanitaria en Chile y especialmente en Biobío (disponibles en www.comitecovid19.cl). También analizan los datos buscando patrones, y proyectan -por medio de fórmulas- los diferentes escenarios que podría generar esta pandemia. Y todo “en simple”, como explica Camilo Mejías. Sostiene que hoy es importante reducir la incertidumbre de la gente, y que una forma de hacerlo es explicando adecuadamente las gráficas e información que se entrega a las personas.
Mejías, el único latinoamericano que integra el grupo de modelamiento de la Universidad Johns Hopkins, añade que para la elaboración de sus gráficas usan los datos y cifras oficiales del ministerio de Salud, pero poniendo énfasis en la realidad de cada región o en situaciones que conciten una mayor atención en un momento en particular.
Primeras acciones
El Comité Científico está estructurado en 13 áreas de trabajo. “Entre ellas está el equipo matemático, otro que se encarga de revisar toda la literatura, otro grupo que está estudiando cómo maximizar la utilidad de los ventiladores mecánicos, o el de los biólogos moleculares, que analiza cuáles son los mejores exámenes para detectar el Covid-19”, detalla Montoya.
Como ejemplo del trabajo efectuado, menciona uno de los avances en una de las áreas del comité. “Buscábamos un examen fiable y económico que pudiera efectuarse masivamente, y hace algunas semanas Juan Pablo Henríquez, presidente de la Sociedad Chilena de Biología Celular, y miembro de este Comité, dio con el CRISPR, una tecnología de edición genética que se usa para detectar el ARN viral. Estamos trabajando en eso, y creo que vamos por buen camino, porque la semana pasada apareció en el New York Times que un grupo de científicos de Harvard estaba desarrollando un prototipo para un test que detecte el Covid-19 con esta misma tecnología”.
Montoya explica que, además, el comité elaboró un protocolo con medidas para prevenir el contagio del Covid-19 para los trabajadores de la salud de la zona, “que ahora pasó a ser el protocolo del servicio de Salud”, dice.
También crearon uno para las empresas locales, que hace un mes está en funcionamiento con buenos resultados. “Los empresarios de la región del Biobío se han preocupado de proteger a sus colaboradores. Fue a petición de ellos que elaboramos el protocolo de trabajo que hoy se está usando en muchas compañías”, comenta Montoya.
En el tope de línea
El Comité también está trabajando de cerca con los municipios de la región. Implementó un proyecto piloto con las municipalidades de Santa Juana y Penco para desarrollar modelamientos, por georreferenciación de clúster de contagio de los casos de Covid-19 existentes en esas comunas, y está apoyando en esta crisis sanitaria a los alcaldes de las provincias de Arauco y de Biobío, por separado.
“Quisimos poner el comité a disposición de los municipios, trabajar con ellos y sugerirles medidas basadas en la evidencia científica más reciente. Así, por ejemplo, se están cuidando las casas de reposo y los hogares de ancianos, y se ha aconsejado la compra de saturómetros de oxígeno para evaluar la capacidad pulmonar de los adultos mayores, así como para hacer seguimiento de pacientes Covid-19 positivos. Todo esto porque creemos que la lucha contra esta pandemia tiene que darse principalmente desde las comunas y la salud primaria”, enfatiza Montoya.
Además, apoyaron la implementación de una plataforma de inteligencia artificial que permite evaluar a diario el riesgo de contagio por Covid-19 del personal del Hospital Traumatológico de Concepción, y se encuentran trabajando con el Centro de Simulación Clínica del Servicio de Salud penquista. “Allí se están formando médicos en técnicas adecuadas de intubación y uso de equipo de protección personal, y tens y enfermeros, en toma de muestras, y cuidado y manejo de pacientes”. De igual modo, también se les está instruyendo, específicamente, en cuidados paliativos, de modo que puedan atender de la mejor manera a aquellos pacientes que serán tratados con manejo compasivo en sus casas.
El noveno, el “día D”
Por estos días, los chilenos están preocupados. Los angustia que la cifra de nuevos contagios a diario se empine muy por encima de los mil casos, algo que ya habían anticipado los modelamientos del equipo de Camilo Mejías
El matemático explica que debido a la geografía de Chile se hace necesario hacer modelamientos específicos para cada zona, pues es la única forma de conocer el desarrollo de la pandemia en ese territorio, y hacer proyecciones que permitan a las autoridades tomar decisiones bien informadas.
“Si analizamos la evolución de Santiago, por ejemplo, vemos que no había tenido un peak, y que recién hace unos días explotó el número de contagiados. Desgraciadamente, la pendiente se ve constante, por lo que de seguro van a seguir aumentando los casos. En Concepción, en tanto, la gráfica muestra que ya tuvimos un peak a principios de abril y que, luego, el número de nuevos positivos comenzó a bajar”.
Sin embargo, Mejías llama a no confiarse, por tratarse de un escenario altamente dinámico. Por eso, dice, si no se toman las medidas adecuadas en el momento justo, o la gente no las respeta, la evidencia muestra que aproximadamente 12 días después la curva vuelve a subir, “tal como está pasando ahora”
Enfatiza la importancia de considerar los datos región a región, pues cada zona alcanzará su peak en distintos momentos respecto de las otras. “Las medidas no pueden ser estándar para todo el país, deben tomarse considerando las distintas realidades y situaciones sanitarias que está experimentando cada territorio. Esa es la única manera de que sean efectivas”, recalca.
Mejías también da cuenta de la alta correlación que existe entre los peaks de infectados y el alza en el número de fallecidos, que se produciría a los 9 o 10 días. Comenta que la conexión entre ambas variables no es solo una conclusión a la que su equipo haya llegado, sino que también la estudiaron simultáneamente investigadores de la PUC y el vicepresidente de Yahoo Research. “Todos llegamos al mismo resultado: la correlación entre ambos factores es clara y absolutamente lineal. Hay 9.2 días entre uno y otro”.
Agrega que es por eso que resulta preocupante la situación de la Región Metropolitana. Si la situación sigue descontrolada, explica, la cifra de muertos podría comenzar a subir esta semana. “Creo que es justamente para prevenir eso que el Gobierno acaba de poner a más de cinco millones de personas en cuarentena, algo que nunca había hecho”.
Tanto Camilo Mejías como el Dr. Fredy Montoya enfatizan la importancia de entender que, en esta situación, nuestras acciones afectan a todos. “Nosotros aportamos con nuestros conocimientos y las ganas de encontrar soluciones a este problema, de modo de lograr que los efectos de este virus no sean tan devastadores para la región y para el país, y que podamos volver lo antes posible a una cierta normalidad”, dice Mejías.
Montoya añade: “Nuestro interés es aportar. Este Comité interdisciplinario ha probado que profesionales de distintas áreas pueden trabajar juntos, colaborativamente. Pero en esto no podemos estar solos. Necesitamos que las personas sean responsables, se cuiden a sí mismas y a los demás, y que todos trabajemos por un mismo objetivo: salvar vidas”.