Condominio de Edificios Parque Millaray entregará su primera etapa, de tres edificios, en octubre. La segunda, ya en construcción, deja abierta la posibilidad de vivir en ella.
Un desarrollo inmobiliario con cualidades inéditas en este tipo de obras ofrece Inmobiliaria Domus. Se trata del Condominio de Edificios Parque Millaray, de cálido diseño arquitectónico, ubicado en Avenida Pedro Aguirre Cerda, de San Pedro de la Paz, entre los puentes Llacolén y Chacabuco.
Helen Martin y Enrique Ulloa, socios de Domus, señalan que el condominio posee tres edificios, con departamentos de uno, dos y tres dormitorios y que su ubicación y vista hacia Concepción son ventajas inmejorables. El condominio está frente al río Bío Bío y desde sus edificios, o el cerro, se puede observar la Bahía de Concepción y la de San Vicente, Concepción urbano y mucho más, de día o de noche.
El equipamiento es otra ventaja dado que cuenta con acceso controlado, salas de uso múltiple, piscina, lavandería y gimnasio. Cerca de colegios, supermercados, restaurantes y clínica. Todo para tener la mejor calidad de vida.
“La conectividad es estupenda, los residentes no sufrirán la congestión vehicular que agobia a los sanpedrinos al usar la ruta a Coronel, problema que se traspasa al entrar o salir hacia o desde otros sectores altos de la comuna”. Contar con locomoción en la puerta es otra gran ventaja, destacan los socios.
Agua segura y menos gastos comunes
La “guinda de la torta” de este proyecto es que los residentes podrán reducir en 80 por ciento su costos de gastos comunes asociados a la presurización de los edificios, gracias a un sistema de elevación de agua, que permitirá la disponibilidad de 40 mil litros en caso de corte de energía eléctrica y de 65 mil si el corte es del servicio de agua potable.
Los socios explican que uno de los objetivos en el desarrollo del proyecto fue lograr dar mayor sustentabilidad y trabajar en el ahorro de energía. Dentro de la hectárea y media de terreno total en la cual están emplazados los tres edificios, se dejaron siete mil metros de áreas verdes en el cerro que colinda con Llacolén, y que poseen una altura suficiente que permite abastecer de agua potable sin el uso permanente de bombas. “Eso lo convertimos en una oportunidad de uso y vida para los edificios”.
Para lograr este objetivo se instalaron dos estanques, uno en la base y otro en lo más alto del cerro. Subir el estanque fue otro desafío y la única manera de lograrlo fue usando un helicóptero con un equipo que lo elevó y posicionó con precisión en medio del bosque.
Además, hay siete mil metros de cerro y bosque, dentro del perímetro del condominio, que Domus optó por mantener como una inmensa área verde para solaz de los residentes. Actualmente está siendo habilitada con senderos y miradores y, en un futuro cercano, un puente conectará directo al bosque desde el segundo edificio. Adicionalmente, el talud del cerro ha sido tratado mediante un sistema de hidrosiembra, inyectando a presión semillas que se adhieren al cerro para generar una capa vegetal con pasto y arbustos, devolviendo el verdor y armonizando con el bucólico entorno.