El IP de la Universidad de Concepción: Virginio Gómez cumple 34 años con sólidos avances en la calidad de su formación

/ 23 de Diciembre de 2022
Estudiantes de Técnico en Enfermería en laboratorio de simulación.

Uno de los hitos alcanzados es que desde este año la casa de estudios forma parte de las instituciones de educación superior adscritas a la gratuidad, lo que es resultado del trabajo realizado desde la planificación estratégica actual, que primero los llevó a una acreditación avanzada.

 

Fue un 24 de noviembre de 1988 que se inició la historia del Instituto Profesional Dr. Virginio Gómez (IPVG), en Los Ángeles, ciudad que vio nacer a su homónimo Don Virginio Gómez González, uno de los impulsores de la creación del Hospital Regional y de la Universidad de Concepción, y todo un visionario de las necesidades profesionales del país.

A 34 años de ese importante hito, hoy el IPVG cuenta con más de siete mil estudiantes y 35 mil titulados y tituladas que avalan la calidad de la formación entregada, a través de su contribución al desarrollo del país y sus diversas actividades económicas, aportando a su productividad y competitividad.

Parte de ese sello se ve reflejado en los sólidos avances que en este último año han marcado el crecimiento de esta casa de estudios, como fruto del compromiso y del trabajo de la comunidad virginiana, que tiene a los estudiantes en el centro de su quehacer. Uno de ellos, fue la obtención de la gratuidad, instrumento financiero que permitirá no solo incrementar los beneficios estudiantiles, sino también que muchas y muchos jóvenes puedan cumplir su sueño de estudiar en el IPVG.

Así lo comentó su rector, Dr. Rolando Hernández Mellado, quien destacó esta decisión por parte del ministerio de Educación. “La educación técnico profesional es fundamental para el desarrollo de las regiones y del país, por lo que fortalecer su accesibilidad nos permite responder con mayor solidez a las demandas de crecimiento que Chile necesita. Estar adscritos a la gratuidad no solo respalda el modelo y calidad de la educación que entregamos a nuestros estudiantes, sino que es una oportunidad para todos aquellos que queriendo estudiar con nosotros y llevar el sello de nuestra institución, no podían hacerlo. Ahora, contaremos con más oportunidades para que puedan cumplir su sueño de formarse como técnicos y profesionales en el instituto de la Corporación de la Universidad de Concepción”, mencionó la máxima autoridad.

La gratuidad está dirigida a familias que pertenecen al 60% de menores ingresos de la población chilena, de acuerdo a la calificación derivada del Formulario Único de Acreditación Socioeconómica (FUAS) del ministerio de Educación. Gracias a ella, los beneficiados no deberán pagar el arancel ni la matrícula en su institución durante la duración nominal de la carrera. Sin embargo, comenta el rector Hernández, “las personas incluidas en este segmento necesitan muchas más oportunidades que solo la gratuidad”.

Estudiantes en el laboratorio de Energías Renovables, el más moderno del centro y sur del país.

En el camino seguido por la casa de estudios destaca su permanente compromiso con la educación. “En este aniversario celebramos que después de 34 años seguimos consolidándonos como una institución educativa de calidad, con una destacada trayectoria en la formación de técnicos y profesionales en las regiones de Ñuble y Biobío”, acotó el rector del IPVG.

Proyectos destacados

No solo la gratuidad forma parte de los avances, sino también los distintos desafíos que abordó el Instituto este año, siendo la innovación, la transferencia tecnológica, la equidad de género, el aseguramiento de la calidad y los fondos de innovación para la competitividad regional los que marcaron su quehacer educacional.

Este año, más de 700 estudiantes participaron de la segunda versión del concurso Desafíos IPVG 2030, torneo en el que se impulsaron 39 proyectos que dieron solución a problemas reales de distintas empresas y organizaciones, a través de la innovación social y la transferencia tecnológica.

“A lo largo de este torneo nuestros estudiantes se transformaron en agentes de cambio, resolviendo problemáticas y creando nuevas herramientas que buscan generar un impacto significativo en el desarrollo sustentable de los territorios, mejorando -con ello- la calidad de vida de las personas”, comentó la vicerrectora de la casa de estudios, Claudia Mora Méndez.

Las iniciativas que lograron adjudicarse el primer lugar fueron: un software, diseñado por estudiantes de Técnico en Electricidad, que permite tomar decisiones de riego inteligente para optimizar el uso del agua, en un contexto donde la crisis hídrica es una problemática que afecta de manera profunda la subsistencia de distintos predios agrícolas. Y también, un kit compuesto por distintos juegos y actividades interactivas para reforzar la expresión oral de los niños y niñas que han enfrentado mermas comunicativas producto de la pandemia, el cual fue creado por alumnas de Técnico en Educación de Párvulos.

A estos proyectos se suma la creación de la Unidad de Equidad de Género para velar por el cumplimento de la Ley 21.369 que regula el acoso sexual, la violencia y discriminación de género en el ámbito de la educación superior.

En esta línea, el IPVG quiso ir más allá y dio un salto cualitativo en la materia al proponer la creación del primer Observatorio de Género y Equidad (OGE) en las regiones de Ñuble y Biobío, nacido desde la necesidad de contribuir y promover el debate y la reflexión colectiva respecto de la situación de equidad en las instituciones educativas. Asimismo, pretende generar alianzas colaborativas que permitan avanzar en este punto con entidades públicas y privadas del territorio.

Esto entendiendo que, de acuerdo con la Ley de educación Superior, las entidades educativas cumplen un rol fundamental al ser gestoras del cambio en su entorno para propiciar la igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres, sin discriminación ni sesgos, porque es en ellas donde se cultivan los principios y valores que orientan la vida colectiva.

Estudiantes de Ingeniería en Automatización y Control trabajando en conjunto con el Liceo Crisol del Mulchén en el contexto del concurso Desafíos Industriales 2030.

Por otra parte, uno de los objetivos establecidos para este año fue el fortalecimiento de la relación con el entorno, el cual se materializó a través de la adjudicación de recursos del Fondo Nacional de Desarrollo Regional (FNDR), enfocado al fortalecimiento del desarrollo local, y del Fondo de Innovación para la Competitividad Regional (FIC-R), Modelo de Gobernanza Gestión Mercados Municipales, ejecutado en conjunto con el Gobierno Regional, y cuyo objetivo es contribuir al desarrollo económico de las comunas de Talcahuano, Los Ángeles y Cañete.

Sobre esta iniciativa, el rector Rolando Hernández sostuvo: “para nuestra casa de estudios es un orgullo ejecutar proyectos de esta naturaleza, que aportan directamente a las personas, a los locatarios y a las municipalidades donde el Instituto está inserto”.

Vinculación con la Educación Media Técnico Profesional

Sin duda, una de las fortalezas del IPVG es su articulación efectiva y permanente con la Educación Media Técnico Profesional (EMTP) y, para reforzarlo, este año inició su Plan de Formación de Alternancia, en el que participaron 154 estudiantes de distintos establecimientos educacionales de Ñuble y Biobío, entre los que destaca el Liceo Polivalente Las Salinas, el Liceo Técnico Femenino de Concepción y el Liceo Industrial Metodista de Coronel.

Fueron un total de seis los programas de alternancia impartidos, los que abarcaron las áreas de informática, mecánica automotriz, párvulo, logística, industria alimentaria y químico analista. Para Daniela Fierro, directora del Liceo Técnico Femenino de Concepción, esta iniciativa es una oportunidad única e histórica, ya que va en pro de la futura formación de las estudiantes. “Este es un vínculo que agradecemos mucho, pues amplía los horizontes de nuestras alumnas, mostrándoles una vía de educación distinta, con más alternativas, y no solo en el ámbito laboral, sino también en la continuidad de estudios”, concluyó.

La formación por alternancia es una estrategia de aprendizaje vinculada al currículum EMTP, que combina la formación del liceo con la de otros espacios de aprendizaje como empresas, CFT, IP, organismos públicos, entre otros. Así también, esta iniciativa busca entregar a los estudiantes oportunidades de desarrollar y perfeccionar sus conocimientos, competencias técnicas y habilidades socioemocionales, preparándolos para el mundo del trabajo y/o para continuar estudios en la educación superior e ir logrando trayectorias formativas.

Nuevos desafíos

Este año la casa de estudios comenzó la construcción de su nuevo Plan Estratégico Institucional para el quinquenio 2023-2027. “Este momento es crucial para poder determinar lo que queremos lograr como institución, y no solo lo que anhelamos quienes estamos dentro, sino también lo que espera la comunidad y los futuros estudiantes de una organización que siempre ha mostrado seriedad en la formación de profesionales. Es por ello que debemos seguir a la altura”, comentó el rector Rolando Hernández.

De esta manera, el desafío se focaliza en incorporar en profundidad la innovación y la transferencia tecnológica en el centro de su quehacer, y posicionar como objetivos la formación a lo largo de la vida, la calidad, la mejora continua y la vinculación permanente con el entorno, de manera de ser una institución que no solo tiene como objetivo la excelencia en la formación técnico profesional, sino también contribuir, desde la educación, al crecimiento económico y social de los territorios.

O’Higgins 680, 4° piso, Oficina 401, Concepción, Región del Biobío, Chile.
Teléfono: (41) 2861577.

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