“Esta acreditación nos permitirá postular a la gratuidad, la que -en caso de concretarse- posibilitará que nuestros estudiantes que cumplan con los requisitos accedan a este beneficio a partir del año 2022”, expresó el rector nacional del IP-CFT Santo Tomás, Juan Pablo Guzmán
En el marco de su proceso de acreditación institucional, con orgullo se recibió recientemente en Santo Tomás la noticia de que su Instituto Profesional logró acreditarse por un período de 5 años en las áreas de Gestión Institucional y Docencia de Pregrado. Con este hito, el IP Santo Tomás alcanza una acreditación de nivel avanzado, que viene a sumarse a la ya obtenida por el CFT Santo Tomás en 2019.
Es en este contexto que Juan Pablo Guzmán, rector nacional del IP-CFT Santo Tomás, describe los nuevos desafíos que la casa de estudios superiores deberá enfrentar. “Esta acreditación nos impulsa a continuar demostrando que somos una institución que, de la mano de la mejora continua, sigue aportando al progreso de Chile, y que está plenamente comprometida con el desarrollo integral de sus estudiantes, brindándoles el acceso a una formación técnica y profesional de excelencia que les permita cumplir sus metas personales y contribuir al desarrollo de sus comunidades y del país”, detalla.
Por su parte, Roger Sepúlveda Carrasco, rector de Santo Tomás Región Biobío, afirma que “la decisión de la Comisión Nacional de Acreditación es un tremendo reconocimiento a una entidad que se ha preocupado de hacer bien las cosas, lo que se refrenda en esta acreditación de nivel avanzado, que es la más alta que hemos tenido en la historia institucional”.
Añade que el excelente resultado alcanzado en éste, el sexto proceso de acreditación institucional al que se somete voluntariamente la casa de estudios en las áreas de Gestión Institucional y Docencia de Pregrado, refleja el trabajo sostenido, serio y responsable que, como institución, han realizado. “También da cuenta del doble desafío que tuvimos que enfrentar con el estallido social y la pandemia durante todo el año 2020, una prueba no menor que muestra la alta calidad de formación que seguimos entregando a nuestros estudiantes”, sostiene.
Comprometidos con la excelencia
Este hito alcanzado por la institución en materia de aseguramiento de la calidad representa no solo el fortalecimiento del proyecto que tiene el Instituto Profesional Santo Tomás en la Región, sino también sus esfuerzos a nivel nacional por formar técnicos y profesionales integrales, los que hoy suman un universo de casi 25 mil alumnos.
Es así como los estudiantes del IP se han convertido en el foco del quehacer de la institución, que desde 1987 ha seguido un largo camino hacia su consolidación dentro del sistema de educación superior chileno.
“Hay que entender que este es un proceso de mejoramiento continuo, que implica la constante adaptación a los cambios en la legislación que rige la educación superior. Un ejemplo de esto es la nueva Ley N° 21.091 que, entre otros aspectos, hace obligatoria e integral la acreditación institucional, sumando nuevas dimensiones de acreditación”, enfatiza Juan Eduardo Matamala, director académico del IPCFT Santo Tomás en Concepción.
El directivo agrega que la casa de estudios se adelantó a esta exigencia, lo que no solo refleja su compromiso con la formación de técnicos y profesionales de excelencia, sino que implica su temprano entendimiento sobre el alcance de los resultados de dichas acreditaciones para la obtención de becas y créditos otorgados por el Estado a los jóvenes que quieren cursar estudios superiores.
Durante la pandemia, la institución ha declarado que el foco de su accionar ha estado puesto en mantener un servicio educacional de calidad, bajo condiciones equivalentes a la presencialidad, y considerando las características propias de la provincia de Concepción. Esta estrategia les posibilitará este año avanzar en la programación de actividades prácticas esenciales, en la medida en que las condiciones sanitarias lo permitan.
“Pensando en lo que aún queda por enfrentar, el año académico 2021 mantendrá características similares a las de 2020, al menos hasta que se logre avanzar lo suficiente en el plan de inmunización masiva contra el Covid-19. Por lo mismo, como IP-CFT, se ha definido un Calendario Académico 2021 global, que permitirá una planificación adecuada para el desarrollo de las actividades académicas en nuestros programas”, señala Matamala.
En cuanto a la oferta académica, Nicolás von Caprivi, director de Admisión Santo Tomás en Concepción, informa que carreras tradicionales y de altísima empleabilidad, como Construcción Civil, Ingeniería en Administración y Contador Auditor, no requieren esperar los resultados de la PDT para matricularse. “La carrera de Construcción Civil, por ejemplo, reestructuró su malla curricular para actualizarla a los nuevos desafíos de la construcción, incorporando la metodología de trabajo BIM (Building Information Modeling) y la enseñanza de softwares de última generación, como Revit y AutoCad. A la nueva malla se suma el uso intensivo de Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) que buscan apoyar en su proceso de aprendizaje a los estudiantes que trabajan, y que necesitan una formación que les permita compatibilizar los estudios con el trabajo y la vida familiar y social. Lo mismo se hizo con las carreras de Administración”.
En cuanto a los programas de Ingeniería en Administración y Contador Auditor, cuentan con certificaciones en diferentes áreas de estudio, las que permiten que el estudiante pueda desempeñarse laboralmente en forma paralela al estudio de su carrera profesional.
Von Caprivi añade que dado el nuevo contexto en que estamos viviendo, ciertas habilidades y conocimientos profesionales de algunas áreas se han vuelto más relevantes para las empresas. “Ejemplo de ello son los ingenieros informáticos, que han tomado un rol protagónico durante la pandemia en temas de conectividad y telecomunicaciones, incrementado sus expectativas laborales y de sueldo, o los diseñadores gráficos, que han sido claves en la elaboración y apoyo de campañas de marketing digital, piezas gráficas para medios digitales, en redes sociales o en campañas de mailing”.
También destaca la relevancia alcanzada por los comunicadores audiovisuales digitales en la creación de spots publicitarios y en la generación de contenidos para lograr una comunicación eficaz con grupos masivos. “Estos nuevos requerimientos del mercado laboral han implicado que haya una mayor cantidad de jóvenes interesados en estudiar esas carreras”, detalla von Caprivi.
En cuanto al proceso de matrícula, a pesar de los retos impuestos por la pandemia Santo Tomás se adaptó exitosamente. De hecho, el inicio del proceso, en octubre, se dio en pleno periodo de cuarentena, lo que llevó a la casa de estudios a instaurar la modalidad de Matricula Asistida, que consistió en que un ejecutivo contactara desde su propio hogar al nuevo estudiante para ayudarlo a concretar su proceso de matrícula. A eso se sumó la implementación de la Matrícula Online, a través de la plataforma tupuedes.cl, algo inédito para la institución y que sigue siendo un soporte vital para los estudiantes.
Sólida vinculación
Gracias a su compromiso con la comunidad, el Instituto Profesional Santo Tomás logra impregnar en sus estudiantes un alto sentido de respeto por las personas y de responsabilidad social, lo que busca fortalecer sus habilidades blandas y prepararlos para trabajar en pro de la comunidad en la que se desenvolverán.
Ejemplo de ello es la labor que realiza la carrera de Psicopedagogía con el Hogar de Cristo, a través del programa Súmate, y con ProInfancia Chile, una ONG dedicada a mejorar las condiciones de niños, niñas y adolescentes que viven en situación de extrema pobreza y vulnerabilidad. Para ellos, han desarrollado evaluaciones pedagógicas que determinan diversas necesidades educativas especiales, y han organizado instancias de debate, análisis y apoyo a la comunidad más vulnerable.
A estas acciones se suman las desarrolladas por las carreras de Servicio Social y Técnico en Trabajo Social, que han presentado diversas propuestas en torno al trabajo infantil, en el marco de un convenio entre el IP Santo Tomás -junto al Departamento de Trabajo Infantil- y la seremi del Trabajo y Previsión Social, instituciones que han estado trabajando a través de la Mesa Regional de la Niñez para establecer estrategias colaborativas que permitan proteger la infancia.
Otro de los proyectos que, sin duda, marcó el quehacer de 2020 y el inicio de 2021 fue el proyecto desarrollado por las carreras de Diseño Gráfico, Turismo y Gastronomía en conjunto con la unidad de Turismo de la municipalidad de Talcahuano. En la iniciativa, académicos, docentes y estudiantes trabajaron junto a 12 empresarios gastronómicos del borde costero de la comuna puerto, específicamente del sector la Poza y de caleta El Morro, con el objetivo de reactivar la industria e impulsar la diversificación y el desarrollo de la oferta turística de la comuna.