Pasada ya una semana de estas “súper” vacaciones de invierno 2022, los padres buscan actividades para seguir pasando tiempo con sus niños y así hacerles más llevadero este periodo de descanso en casa. Combinar este objetivo con el teletrabajo a veces cuesta, pero con organización, comunicación y buen ánimo se puede lograr.
(Fuente: RedSalud)
Son muchos los padres y madres que llevan una semana enfrentándose a un receso escolar invernal extendido que ocurre justo en un periodo donde a raíz de la pandemia, varios se encuentran con jornadas de teletrabajo.
Para facilitar este periodo, la psicóloga clínica de RedSalud, Camila Figueroa, recomienda no enfrentarse a estas semanas con la percepción de que va a ser estresante, sino más bien desde la organización de los tiempos, para conciliar las vacaciones de los niños con el trabajo de sus padres.
Para ello, sugiere, es clave organizarse con la pareja o algún familiar, y coordinar los tiempos y panoramas que se desean realizar, de manera de explicarles a los más pequeños con antelación los panoramas y así reducir el estrés y la irritabilidad”.
Agrega que si hay padres que no pudieron tomar vacaciones, se puede buscar algún espacio de la semana o el fin de semana para realizar actividades en conjunto, de manera que todos puedan disfrutar en función de los intereses familiares. “Quizás no es el momento para ir a un lugar lleno de gente, sino que se debe planificar y discernir cuáles actividades les aportan energía y cuáles se las las quitan”, destaca.
Aconseja realizar actividades al aire libre, con tiempos de desconexión que sean más extensos y de calidad. “Por ejemplo, realizar caminatas en familia, practicar algún deporte y estar en contacto con la naturaleza o algún panorama que sea disfrutado por todos y que permita reforzar la comunicación y cercanía”.
Controlar las expectativas
Señala que es importante que los padres expliquen y enseñen a los hijos que ellos siguen trabajando, que deben concentrarse en estas tareas y que cuantas menos interrupciones tengan, antes podrán compartir con ellos. “Se pueden aprovechar momentos, como las comidas para contar de su día, comentarles en qué trabajan, con el objetivo de que puedan comprender por qué no pueden atender todas su necesidades o deseos de salir. Se trata de controlar las expectativas”, puntualiza.
Por otra parte, la experta indica que respetar las horas de sueño es clave para mantener una salud mental equilibrada. “La idea es no olvidarnos del propio cansancio. Es importante que el núcleo familiar pueda lograr un descanso reparador, es decir, alrededor de 8 a10 horas. Dormir poco influye no solo en nuestro rendimiento, sino que en nuestro en el estado de ánimo, provocando que estemos más irritables”, concluye.