Profesionales con sólidos conocimientos científicos, con compromiso social, con amplias habilidades blandas, respetuosos de la dignidad del paciente y orientados al servicio público serán los que busca formar la carrera de Medicina en UNAB, sede Concepción.
Desde hace varios años, la Universidad Andrés Bello venía preparándose para la apertura de la carrera de Medicina en su sede Concepción, desarrollando los lineamientos estratégicos del área de carreras de la salud y creando las condiciones que permitieran el adecuado funcionamiento de sus distintas carreras de pregrado y programas de postgrado, vislumbrando el abrir la carrera de Medicina, lo que concretará para el 2016, con 40 cupos.
“La educación y la salud son dos componentes fundamentales del desarrollo humano, y es tarea de toda universidad moderna contribuir, a través de sus diversas funciones, a este desarrollo”, afirma el Dr. Octavio Enríquez, vicerrector de la sede Concepción. En este sentido, destaca que son múltiples las evidencias que demuestran que, a pesar del progreso sanitario alcanzado, el país requiere un mayor número de médicos, tanto generales como especialistas. “Para satisfacer esta necesidad, las universidades que garanticen criterios de calidad, están convocadas a contribuir con este propósito de formación médica”.
Agrega que, tras completar un período de rigurosa formulación y evaluación del proyecto, se tomó la decisión de abrir la carrera de Medicina en Concepción, “la que cumple con las condiciones y requisitos que aseguran su calidad y pertinencia, con una formación moderna, y recursos e infraestructura necesarios”, sostiene.
Medicina con sello unab
El Dr. Helmuth Goecke, director de la carrera de Medicina en la sede Concepción, detalla que la Escuela de Medicina “nace para formar un profesional con sólidos conocimientos científicos, habilidades y competencias que le capaciten para desempeñarse en forma eficiente y destacada en sus diversas áreas. Pero también el estudiante debe ostentar sólidos principios éticos y habilidades efectivas de comunicación, ser respetuoso de la dignidad y los derechos de las personas, orientado a contribuir y aportar a la solución de las necesidades de salud de su comunidad, y dotado de un espíritu crítico, proactivo, investigador y emprendedor”.
Por su parte, el Dr. Jorge Cabrera, profesor titular de la Facultad de Medicina en Concepción, añade que si bien todas las escuelas de Medicina tienen una base común en cuanto a la calidad del profesional a formar, cada universidad le otorga un sello propio. “Nosotros pretendemos formar un profesional que tenga las competencias necesarias para insertarse adecuadamente en el medio, de acuerdo a las necesidades de salud de la población, con un fuerte apego a la salud pública del país”.
Agrega que si bien es evidente la necesidad de más médicos -pues Chile tiene 1.7 médicos por cada mil habitantes, mientras que el promedio de los países pertenecientes a la OCDE es de 3.2-, “lo que necesitamos son médicos que busquen resolver los grandes problemas de salud que hay a nivel mundial”. Así, destaca, “es fundamental humanizar a los nuevos médicos para que lleguen a ser excelentes profesionales. Y en eso trabajaremos en la Universidad pues, acorde a nuestro perfil y al sello UNAB, la carrera contempla la enseñanza de habilidades blandas, que van desde la comunicación y la ética profesional hasta el potenciar el trabajo en equipo, además de implementar fuertemente un modelo de atención basado no sólo en el diagnóstico y tratamiento de patologías, sino también en la prevención”.
A la vanguardia en Centros de Simulación
La labor práctica docente se complementa con el trabajo en los Centros de Simulación de Alta Complejidad donde, gracias a equipamiento de última generación, los estudiantes abordan las complejidades propias de la atención en salud, bajo el seguimiento constante de docentes especializados.
“Cada vez es más relevante el uso de la simulación en los procesos educativos en carreras de la salud, pues tenemos usuarios cada vez más exigentes e informados. Por ello, los centros de simulación constituyen un método de enseñanza y aprendizaje efectivo para lograr en los estudiantes el desarrollo de un conjunto de competencias necesarias que posibiliten alcanzar los objetivos del perfil del egresado”, afirma el Dr. Goecke. Añade que este entrenamiento tiene el propósito de ofrecer al estudiante la oportunidad de realizar una práctica análoga a la que realizará en las diferentes áreas o escenarios docente-asistenciales, posicionándose como un importante complemento de la formación.
Formación en Ciencias Básicas para el futuro médico UNAB
La profesora, Dra. Verónica Jiménez, del Departamento de Ciencias Químicas de la Facultad de Ciencias Exactas, sede Concepción, señala que en concordancia con el modelo educativo institucional, el itinerario formativo del futuro médico UNAB se sustenta en una sólida base científica en las áreas disciplinares de Química, Física, Biología y Matemáticas. “A través de las actividades curriculares de las Ciencias Básicas se busca promover la adquisición de nuevo conocimiento disciplinar junto con el desarrollo de competencias profesionales transversales a la profesión médica, tales como el pensamiento analítico-crítico, el razonamiento científico y la valoración del conocimiento como elemento central en la toma de decisiones. El desarrollo de estas competencias no sólo contribuye a enriquecer la formación integral de nuestros futuros profesionales, sino también a favorecer su inserción exitosa en el mundo laboral y a responder a las necesidades que la sociedad en su conjunto demanda de la profesión médica”, afirma.
Docencia moderna
La carrera de Medicina en la sede Concepción, cuyo secretario académico es el profesor Dr. Juan Carlos Toro, profesor asociado de Anatomía, cuenta además con el importante aporte de la Oficina de Educación en Ciencias de la Salud, a cargo del Dr. en Educación Médica, Luis Ramírez. Esta área se encarga de tareas de apoyo tanto a los programas educativos, como al proceso de aprendizaje del estudiante, ayudando tanto a la labor del docente-académico como a profesionales de los servicios de salud que colaboren con la actividad docente. “El objetivo de esta Unidad es asegurar una docencia moderna, centrada en el estudiante y en el docente, entregándoles los elementos y apoyos para un proceso de aprendizaje eficiente”, afirman.
El profesor Toro, que actualmente está a cargo del departamento de Morfología de la sede, será el encargado de impartir las asignaturas de Anatomía I y II, durante el segundo y tercer semestre de la carrera, de acuerdo al programa único que se aplica en las sedes de Santiago y Viña del Mar. “Esta asignatura acerca a los alumnos desde el primer año a los estudios médicos, ya que en ella se abordan aspectos descriptivos, topográficos, funcionales y de aplicación clínica de imágenes, que serán muy útiles en el estudio de las asignaturas de medicina clínica. Cuenta con la colaboración de tres profesores que realizarán las actividades de laboratorios de Anatomía, en las que se contemplan los usos de recursos multimedia, modelos anatómicos y piezas humanas de demostración”, detalla.
En relación a las otras asignaturas que contempla la malla en los primeros años de carrera, señala que la sede Concepción cuenta con la infraestructura y los docentes que desarrollarán los programas de asignaturas que actualmente se aplican y están acreditados por la carrera de Medicina, de acuerdo al modelo educativo institucional, dando especial énfasis a las actividades de enseñanza-aprendizaje centradas en el estudiante, y teniendo presente fortalecer los aspectos de humanismo y profesionalismo que van a contribuir al perfil de egreso del profesional médico UNAB.
El director académico de Pregrado del Instituto de Salud Pública de la Universidad, y Presidente del Comité de Bioética de la Facultad, Dr. Jaime Sepúlveda, señala que la formación del médico en esta casa de estudios considera la investigación como una actividad necesaria de realizar en todos los ámbitos de intervención que los alumnos y docentes participen, en concordancia con lo planteado por ASOFAMECH. “Por ello, las asignaturas de Metodología de Investigación constituyen un pilar fundamental de la formación, con foco en áreas concretas con pertinencia local y social. Así, el médico UNAB es capaz de un buen uso de la evidencia científica, de reconocer adecuadamente las fuentes de información, de una lectura crítica de la literatura médica, y posee los elementos centrales que le permiten realizar e interpretar una investigación”, enfatiza.
Campos clínicos desde primer año
El contacto del estudiante con la realidad se ve desde el primer año de carrera, donde conoce los factores de riesgo y las condicionantes de la salud en la comunidad, las patologías prevalentes y las estrategias actuales para abordarlas. “Con fuerte énfasis en la salud pública de nuestro país, en el modelo familiar, comunitario y participativo, hemos constituido alianzas estratégicas con distintos servicios de salud, que incluyen campos clínicos en calidad de prioritarios, tanto en la Atención Primaria Municipal como en los establecimientos hospitalarios de la Región”, destaca el Dr. Enríquez.
Goecke agrega: “Nuestra gran cantidad de campos clínicos es una de nuestras fortalezas. Es un tremendo plus contar con tantas opciones, y con una visión de trabajo conjunto con los servicios de salud y centros asistenciales, lo que redunda en un beneficio directo para el paciente”.
Los campos clínicos incluyen los hospitales de Tomé, de Penco-Lirquén; Naval, de Talcahuano; Cesfam y centros de atención primaria de las comunas de Talcahuano, Hualpén, Penco-Lirquén, Tomé, San Pedro de la Paz y Concepción. También centros privados de salud como la Clínica Universitaria y Clínica Sanatorio Alemán, de Concepción, entre otros.
A esto se suma que, desde hace tres años, internos de la carrera de Medicina de las sedes UNAB de Santiago y Viña del Mar se encuentran efectuando rotaciones en servicios clínicos de los hospitales de Tomé y Penco- Lirquén. Además, en el año 2014 se inició el programa de Postgrado con asiento en el Hospital Las Higueras, de Talcahuano, en las especialidades de Cardiología y Anestesiología.
En contacto con la realidad local y el mundo
Asimismo, en esta carrera se propiciará que los estudiantes tomen contacto con la realidad desde primer año, se integren a equipos multiprofesionales, y vinculándose al medio como única manera de conocer y aprender las condicionantes de salud en terreno, “viviendo la experiencia del usuario en su medio, y desarrollando tareas de investigación que le permitan completar el aprendizaje en aula, investigación cuyos resultados sirvan tanto a la comunidad como al sistema de salud”, sostiene el Dr. Goecke.
La Escuela de Medicina destaca, también, por su fuerte vinculación a nivel internacional. Mantiene programas de intercambio con Chicago University (EE.UU.), y es la única institución de educación superior chilena que integra el Consorcio Iberoamericano de Escuelas de Salud Pública con Johns Hopkins University (EE.UU.).
“Abrir una carrera de Medicina ciertamente es la consolidación de cualquier área de la salud o de una universidad y se constituye, en sí misma, en una oportunidad para el desarrollo de la actividad docente, para la vinculación con el medio, para la investigación aplicada, para la pertinencia social de nuestro quehacer universitario y para el desarrollo del país y de la Región”, puntualiza el Dr. Enríquez.