Durante más de cuatro décadas, la institución ha promovido el ingreso de estudiantes a la educación superior. Con 22 sedes distribuidas desde Arica hasta Punta Arenas, destaca en la región del Biobío por formar profesionales adaptados a las necesidades locales. Con altos índices de gratuidad y un enfoque inclusivo, se prepara para nuevos desafíos de acreditación, consolidando su compromiso con una educación de calidad para diversas realidades en Chile.
La historia de Santo Tomás inició hace poco más de 45 años, teniendo como objetivo desde sus orígenes entregar mayores oportunidades de acceso a la educación superior.
En la actualidad, la institución tiene 22 sedes, desde Arica hasta Punta Arenas (además de una sede virtual), siendo Santo Tomás Concepción una de las que reúne a estudiantes del Centro de Formación Técnica, Instituto Profesional y Universidad, para formar profesionales de distintas áreas.
Así lo explica Roger Sepúlveda, rector de Santo Tomás Concepción: “En la región del Biobío, Santo Tomás es un ecosistema educativo que ha ocupado un espacio muy importante en la formación de técnicos, profesionales y universitarios. Llegamos cuando había una cultura de educación superior en desarrollo, sobre todo en el contexto universitario, y hoy somos parte relevante de este paradigma”. Y añade que las carreras que ofrece Santo Tomás se adaptan a la industria local y a las capacidades productivas de la región. “Eso nos permite ser parte de su desarrollo no solo en lo económico, sino que, también, en lo social y en lo cultural”.
Estudiantes de diferentes carreras, e incluso desde sus etapas formativas iniciales, comparten en el día a día como personas y como futuros profesionales, muchas veces protagonizando y colaborando en actividades relevantes para las comunidades, tanto interna como externas, a través de proyectos de vinculación con el medio y voluntariados. “Estas actividades van en servicio de las personas que más lo necesitan, aportando así a la región”, agrega el rector.
Consolidada
En palabras de Claudia Hernández, directora de Admisión de Santo Tomás Concepción, la característica particular de Santo Tomás de contar con tres instituciones en la capital de la región del Biobío entrega la posibilidad de que el estudiante elija qué ruta seguir según su proyecto de vida, y así adecuarse a la educación superior.
“No solamente son estudiantes recién egresados, sino que también está el trabajador que quiere continuar estudios o regularizar un título. Está la persona que no ha cursado estudios en mucho tiempo y ahora se atreve. Para ellos, tener estas tres opciones les permite poder elegir en base al proyecto que tienen”, declaró la directora.
Las tres instituciones de Santo Tomás están acreditadas en nivel avanzado. Esto hace posible que los estudiantes puedan acceder a todos los beneficios y becas ministeriales. En el 2023, aproximadamente, un 74% del total de estudiantes que ingresó a Santo Tomás obtuvo la gratuidad, y un 78% estudia con alguna ayuda estatal.
“Además hay que destacar la experiencia de Santo Tomás en la zona, la cual es reconocida. Siempre hay un tomasino, puedes encontrar a los profesionales trabajando en distintas áreas. La mayoría son carreras que llevan mucho tiempo, tienen una historia y un cuerpo docente que es reconocido y que conoce el mundo laboral de la carrera”, destacó.
Santo Tomás se está preparando para los próximos procesos de acreditación institucional. El primero será el del Centro de Formación Técnica, para lo que se entregará el Informe de Evaluación Institucional a la Comisión Nacional de Acreditación durante el primer semestre de 2024, el cual fue desarrollado con la participación de directivos, colaboradores, docentes y estudiantes. Así se busca mantener el compromiso de Santo Tomás de ser una oportunidad de acceso a una educación superior de calidad para las distintas realidades presentes en Chile.
La experiencia de ser tomasino
Loreto Yáñez, estudiante de Comunicación Audiovisual Digital
“En Santo Tomás Concepción ante cualquier pregunta siempre están con la disposición de responder y de ayudar. Se nos invita a ser participativos en el ámbito de distintas actividades que se puedan presentar más allá de nuestra propia carrera. Me han apoyado en varios sentidos, por ejemplo, invitándome a la Escuela de Líderes, la que ayuda mucho a construir tu personalidad, enfrentar tus inseguridades, y te incentivan a que reconozcas tus capacidades”.
Yamil Burdiles, estudiante de Psicología
“Esta institución destaca por su sello inclusivo. Me he sentido muy respetada, y además tienen la disposición a ayudarme en cualquier ámbito que, por mi discapacidad, yo necesite. Me han presentado muchas alternativas de inclusión. Siempre han estado pendientes de mis necesidades, y saben que las personas en situación de discapacidad no tenemos las mismas necesidades, todos somos diferentes, entonces están abiertos al diálogo. Siento que aquí te forman para el futuro. Todas las iniciativas que tenemos, extracurriculares y extraprogramáticas, son super buenas para nuestro desarrollo personal y profesional”.
Adeinys David, estudiante de Comunicación Audiovisual Digital
“Aquí podemos hacer diversas actividades para desenvolvernos en el ámbito social y académico. Soy venezolana. Mi familia vive en Los Ángeles, y yo viajaba a Concepción todos los días. Obtuve una beca para reducir mi arancel, y en el transcurso del primer año hice diversas actividades, lo que originó que fuera elegida como Alumna Sello 2023. Este reconocimiento me dio la posibilidad de no pagar el arancel de un año. Yo no cuento con gratuidad, así es que esto fue un alivio tanto para mí como para mi familia, y ahora puedo arrendar aquí en Concepción. Tuve la oportunidad de trabajar en los Juegos Panamericanos de Santiago 2023, y eso fue una experiencia única que nos va a servir para nuestro futuro profesional”.
Francisco Martínez-Portillo, estudiante de Preparador Físico
“Entré a Santo Tomás siendo becado como deportista, y actualmente juego en la selección de básquetbol. Mi experiencia en la institución ha sido buena. Puedes sentir un trato cercano con la gente, con los profesores, con la Dirección de Asuntos Estudiantiles, y eso ha sido muy agradable. De manera personal ellos me han ayudado en primer lugar con la beca, y de manera académica me entregan las flexibilidades para que yo pueda desarrollarme como deportista”.
José Díaz, estudiante de Técnico en Diseño de Videojuegos
“Estudiar en Santo Tomás ha sido una experiencia interesante. He podido conocer a gente de otras áreas y carreras dentro de la sede, con quienes no pensé que llegaría a interactuar y compartir. Académicamente me han aportado bastante, porque a pesar de que mi carrera es cerrada en comparación con otras, desde mi jefatura siempre me han apoyado e incitado a ser parte de talleres y de cursos. Todo con el objetivo de seguir puliendo mis habilidades. Este año tuve la oportunidad de realizar un videojuego para apoyar a Admisión, que consistió en un test lúdico vocacional, lo que fue muy gratificante”.
Nataly Isla, estudiante de Contador Auditor vespertino
“Al ser verpertino, la experiencia es distinta al diurno. Somos pocos estudiantes, pero esto favorece igual la cercanía con los docentes, porque tienes confianza para conversar. Como muchos trabajamos durante el día, el cansancio se nota y los profesores tienen eso en consideración. Quiero destacar por mi parte al Centro de Aprendizaje como una herramienta de mucha ayuda para estudiantes que tienen dificultades para los estudios o en alguna asignatura en específico”.