La imputación a su hijo Jorge por negociación incompatible lo tiene furibundo. Apunta al Ministerio Público. Tratan de doblegarlo, dice, porque les echó abajo la Ley de “escucha” de celulares que les daba más poder sin ningún contrapeso. En aras de combatir la corrupción, el tráfico de drogas y delincuencia -se recrimina- aprueban todo, incluso los desbordes en que pueden caer los fiscales. “¡Oiga, si a uno lo vuelven loco! Pero que sepa la gente que aquí hay alguien dispuesto a defenderla”. De las críticas por su voto a la Ley antiterrorista también se hace cargo. “¿Y qué le decimos a los agricultores del sur? ¿Que los ataques no fueron actos terroristas porque lo dice el Congreso? Momentito, pues, yo voto en conciencia y no soy ningún cabro chico”.
Quitadito de bulla pero con el cuero duro y tremendo poder político es este senador criado con estrictez moral por un libanés inmigrante avecindado en Cabrero, que rezaba cinco veces al día e inculcó a su descendencia los principios del Islam. Él, sin embargo, nunca aprendió a orar como Mohammed, el padre, y, a diferencia de sus tres hijos bien católicos, sobre todo Jorge, el diputado investigado por negociación incompatible, no es religioso.
Justamente por su primogénito no lo está pasando bien. Y despotrica por la persecución del Ministerio Público (MP) en su contra -“¡no pueden seguir con tanto poder!”, dice, atropellándose en las palabras-, y por el ataque artero -“que raya en la ignorancia”- de su camarada Aldo Cornejo. De las críticas por el rechazo a la indicación concertacionista para excluir de la Ley antiterrorista el delito de incendio contra la propiedad privada en caso que no hubiera muerte, lesiones graves o daños significativos, también se hace cargo.
“¿Qué le vamos a decir a Urban, a Luchsinger y a tantos otros que les quemaron galpones, cosechas, siembras, casas patronales y las de los inquilinos por gente que llegaba a rostro descubierto, con escopetas, carabinas? Les decimos -ironiza- ¡Perdónennos señores agricultores, pero esos no eran actos terroristas porque lo decimos nosotros, el Parlamento! ¿Es posible pedirle (perdón) a miles de personas, víctimas de esos ataques? Siempre he estado de acuerdo en defender al pueblo mapuche. Soy condescendiente con ellos aunque el Estado tenga que pagar el costo económico, teniendo presente que puede ser plausible por la historia, por los atropellos, pero sin alterar una ley que es para todo Chile, una ley que es un de-tén-te”, recalca.
Pero Hosain Sabag Castillo (73, casado, padre, abuelo y DC por siempre) no deja de mover sus hilos. En su emirato ha convertido el precioso y costoso departamento de Concepción, dónde -a partir del desayuno- y estando en la zona, reúne a moros y cristianos, hace y deshace acuerdos, y los aromas de café y cazuela de pava humeante, como en su fundo Peñuelas, se confunden y agasajan a ilustres comensales. Allí pasan revista a la vida política nacional.
Y se ríe con ganas -hasta que sus ojos se ven como una línea en el rostro moreno- ante la insistencia por conocer identidades de quienes, el jueves 30 de septiembre, a la hora de la cena, se sentaron a la mesa que bien sirvió doña Fresia Villalobos, su esposa. “Sólo diré que es un gran personaje del país y con quien estuve cenando en su casa hace tres meses”, dice.
-¿Vinculado al tema mapuche?
-No le corresponde ver eso directamente, pero representa a un grupo importante de Gobierno.
Represalias
Jorge, el hijo diputado, está siendo investigado por negociación incompatible, debido a que tenía inscrita su oficina distrital, en Río Claro 1050, en la misma dirección donde funciona Transporte Cabrero Ltda., su empresa y de propiedad también de su padre y socio. La ley prohíbe a los parlamentarios celebrar contratos con parlamentarios, familiares y socios de éstos, pero el senador hace una interpretación distinta y se lanza, furibundo, en contra del Ministerio Público. Dice: “Jorge siempre ha tenido sus oficinas parlamentarias. En Cabrero es un terreno de 5 hectáreas que está entregado en comodato a la Inmobiliaria Nabatié S.A, una sociedad familiar y donde manda el gerente. Yo actúo pensando en la ciudadanía. Lo hago con valentía y decisión y a algunas instituciones no les gusta y tratan de doblegarme”.
-¿Por eso dice que “los fiscales tienen demasiado poder y no tiene contrapeso de ninguna especie”? como declaró a CNN Chile.
-Nosotros estuvimos viendo una ley con un título muy inocente: Pérdida de los celulares. En la Cámara de Diputados y en el Senado lo vio la comisión de Transportes. Ahí se hacían algunas modificaciones fundamentales al Código Penal y se le daban nuevas facultades al Ministerio Público. Podían actuar, incluso, sin solicitar la orden al juez de Garantía para interceptar llamadas telefónicas. Y yo dije: no.
-¿Cuál era el propósito de esa ley?
-Es una ley muy añorada por el Ministerio Público. En noviembre de 2008 estaban pidiendo modificaciones profundas al Código Penal y me pareció que tenía muchas facultades y ningún contrapeso. Como Parlamento podemos acusar a ministros y jefes de Estado, ministros de las cortes de Apelaciones y Suprema, al Contralor de la República, a otras autoridades, pero no al Ministerio Público. ¿Quién lo controla en sus inversiones, en sus actos? Nadie. Es un poder ilimitado que existe hoy.
-Y a eso usted quiere ponerle remedio ¿no?
-Estamos todos conscientes que ya, tras varios años de ejercicio, es evidente equilibrar ese poder. Cometen excesos, cometen abusos, pero ¿ante quién rinden cuenta? Ante nadie. Es evidente que la mayoría de estas leyes y facultades pasan (se aprueban) en aras de combatir la corrupción, el tráfico de drogas, la delincuencia. Aprobamos todo y no nos damos cuenta cuál es el verdadero significado de muchas de estas cosas. ¿Cuántos son los delincuentes?, ¿cuántos son los traficantes? ¿mil, 20 mil, 50 mil? ¿Cuántos somos los chilenos? 17 millones. A través de este sistema y con amplios poderes podrían seguir a la persona que estimen pertinente; han encontrado el modo de intervenir los teléfonos directamente. ¿Quién controla eso? Cuando estas personas se exceden -no todos, aclara- ante quién recurre usted? Ante nadie. No tiene defensa de ninguna especie, pero que la ciudadanía sepa que aquí hay alguien dispuesto a defender sus intereses.
-¿Y no debería ser la Defensoría Penal?
-Absolutamente. Reclaman a que por lo menos tengan equiparidad. Tal vez en un tiempo más todo esto se vea por la vía legislativa.
-Pero usted contribuyó con su voto a que se modificara el antiguo sistema judicial por uno más garante. ¿No se alcanzó a dimensionar los problemas que íbamos a tener?
-Estas materias las ven las comisiones especializadas de Constitución, Legislación y Justicia. Uno confía en sus colegas y apoyó con su voto lo que decían sus colegas, pero está claro que la Reforma Procesal Penal (RPP) amerita un nuevo estudio para adecuarla a la realidad que está viviendo el país.
– Y usted ¿cuándo cayó en cuenta de los excesos que estaba cometiendo el Ministerio Público? ¿A propósito del caso de su hijo por negociación incompatible?
– Yo diría que a raíz de eso, por ejercer mi función legislativa, lo agarraron a él.
-¿Una venganza, diría usted?
-Una represalia por haber ejercido mi derecho legal de defensa para que las cosas se hagan equilibradas.
– O sea, se la tenían prometida.
-Sé que esto (rechazo de la ley) les dolió mu-chí-si-mo a todos. La siguen reclamando.
-¿Y qué es exactamente lo que les permitía conseguir?
– Una cosa muy simple: actuar libremente. Hay, en la actualidad, un juez de Garantía para garantizar que las cosas se estén haciendo de forma correcta y él (o ella) deben darles las órdenes para actuar o se las niega, muchas veces, porque no es necesario. ¡Oiga, si saben todo!: a quién, cuándo, y con quién. Te vuelven loco.
-Cuando usted analizó los artículos, cartas al director, columnas en los diarios reclamando por tanta potestad del MP -como dice- para oponerse a este proyecto de ley, ¿vislumbró que lo podrían perjudicar como ciudadano también?
-Nosotros necesitamos por el imperio de la ley, por lo que representamos, tener la más plena y amplia libertad para opinar, hablar y exponer. Resulta que también nosotros podríamos ser escuchados, perseguidos y el día de mañana doblegarnos porque descubren que usted, por ejemplo, tenía una amiguita por ahí.
-¿Es eso lo que más le preocupa a los legisladores?
-No, no, y menos a mí, pero cómo está tan de moda, a lo mejor descubren que usted tiene un amiguito por ahí.
-Peor todavía…
-Lo coloco como un ejemplo. Algo así como que, por cualquier cosa, dijeran: a ver, veamos a este carajo. De alguna manera están buscando un grado de venganza o de represalia porque yo fui el autor de echarles abajo esa ley que aspiraban. Desde luego, esto se refleja en que hay más de 10 proyectos de ley presentados por los más diversos signos políticos y parlamentarios, para que los fiscales nacionales y regionales sean acusados constitucionalmente y tengan un grado de contrapeso. No hay ningún poder en Chile que no tenga un control. El Poder Judicial es autónomo pero si cometen excesos, los acusamos constitucionalmente y hemos destituidos a ministros de las cortes de Apelaciones y Suprema. Ellos, en cambio, son intocables.
– Y su colega Soledad Alvear, ¿qué dice?: ella fue la autora que se implementara la RPP en el gobierno de Frei ¿no?
-Está muy consciente de esta situación y está claro, como la inmensa mayoría de los colegas, que es necesario modificar y adecuar esta ley. En poco tiempo más, cuando se finiquiten problemas pendientes, lo haremos.
-¿El de su hijo…?
-Ése y otros más, pero vamos a ser muy objetivos para que el MP le dé garantías a todos los habitantes del país.
Ley antiterrorista
-¿Qué se trae entre manos usted al estar aprobando todas las indicaciones de la derecha?
-He dado mis razones, y en dos iniciativas -sueldo mínimo y Ley antiterrorista- he votado con consecuencia política. No puedo negar que hoy, por ejemplo, es viernes y el reloj marca las 16 horas. No soy mono ni un cabro chico. En el caso del salario mínimo, el único que tiene la facultad es el Ejecutivo (Hacienda) y en 20 años siempre acatamos lo que fijó. Nunca fuimos a una comisión mixta. Esta vez estábamos dando cuatro veces más de lo que estaba dando mi (ex) gobierno (0,5%) real. ¿Por qué voy a decir que no? Yo no estoy para decirle al Gobierno que no a todo, no estoy para eso.
-¿Actuó como DC, concertacionista o aliancista al mantener como delito terrorista atentados a la propiedad privada?
-Todos estamos interesados en buscar una solución. Y más el Gobierno. Ellos tienen la papa caliente en las manos y con sus profesionales presentaron una modificación de ocho artículos a la Ley antiterrorista. Junto con eso, la Concertación presentó dos o tres indicaciones que el Gobierno no quiere ni necesita ni pide. Dicen que la Ley antiterrorista se aplicará solamente a las propiedades públicas y privadas de utilidad pública. Todo lo demás son delitos comunes. O sea, si te lo aplican a ti, vale 2 y a mí vale uno. Eso es inequidad y las leyes se hacen para todos por igual.
Esta ley, de la Constitución del 80 la hicimos de nuevo. Salió el 84 y la modificamos el 91 con Patricio Aylwin y Francisco Cumplido pensando en la experiencia nacional e internacional que teníamos. No había ningún mapuche en problemas (en ese entonces) y nunca se los tuvo a ellos en mente, pero resulta que ahora pretenden que todos los actos, que han cometido queden impunes. ¿Y qué les decimos a los agricultores del sur? La Alianza nunca me ha pedido que vote por ellos o los acompañe en determinada votación, nunca. Lo hago en conciencia y de mutuo propio.
-¿Y por qué una reacción tan virulenta en su contra?
-Lo de Aldo Cornejo tiene un veneno especial, es amigo del fiscal Abbot y tal vez quiso darle una mano. Pero yo tengo experiencia y conozco mi zona y país. Estoy consciente de los aportes de los pequeños propietarios, quienes han vivido grandes incendios. En 2006, incendios forestales intencionales que partieron en Santa Juana y terminaron en Coelemu, por ejemplo, arrasaron con miles de hectáreas, viviendas, animales con el consiguiente daño al medio ambiente y a la tierra. ¿Es lo que querían dejar fuera de todo castigo mayor? Los grandes no pierden un peso porque hasta las estacas tienen aseguradas, pero ¿y el chico…?
Por el hijo, la vida
Demasiado puro, sano y bueno para estar en política, dice de su hijo Jorge el senador Sabag tras enumerar sus virtudes personales y profesionales (Ingeniero Civil de la U. Católica de Valparaíso y abogado de la UDD) y a quién él mismo pidió entrar a la política. “Oiga, es un hombre que, si usted le pide la camisa, la camisa se la entrega. Ya no tiene más que entregarle a la gente, no sé cuántas mediaguas -100 o más antes del terremoto, incluso- ha dado. O apoya para comprar vaquillas, corderos, rifas, manifestaciones, remedios. La gente lo quiere mucho y lo injusto es que esté hoy acusado de fraude al Fisco.
-¿Fraude al Fisco o negociación incompatible?
-Empezaron con fraude al Fisco, siguieron con negociación incompatible y cuando se vieron perdidos, volvieron a la figura del fraude basándose en declaraciones de los candidatos a parlamentario Jorge Brito y familia, Felipe Letelier y familia y adherentes. Dijeron que no tenía oficina en circunstancias que siempre las ha tenido, tanto en San Carlos como en Cabrero. Ahí le llega la correspondencia. Hay múltiples antecedentes de que son oficinas parlamentarias. Lo lamentable de esto es que esos candidatos derrotados, Brito y Letelier, hicieron toda su campaña atacando a Jorge.
– ¿Y no son de la Concertación? ¿Se muerden unos con otros?
-Letelier era el compañero de lista. En el sistema binominal, cuando sale uno solo, el enemigo es el compañero de lista. Y tratan de destruirlo y hacerlo pedazos como sea. A Jorge trataron de destruirlo durante la campaña y después la fiscalía los buscó para establecer, con esos testigos que la oficina no existía.
-¿Le preocupa que deba pagar con cárcel?
-No. no, no.
-¿Qué sea deshonrado?
-Los cargos que se le hacen son infundados, fuera de todo foco. Cuando se sacó la Ley de probidad (N°20.285), en 2005, Andrés Zaldívar, Viera Gallo y Núñez presentaron una indicación para incluir a los poderes Legislativo y Judicial del Estado en las mismas condiciones en que está la administración pública. La Corporación no puede tener ningún negocio con el parlamentario y sus parientes, pero agrega que “sin embargo en circunstancias especiales podrá comprarle (…) para lo cual deberá pedir la autorización a la comisión de ética de la Cámara de Diputados o del Senado y a la del Poder Judicial. Todo esto se incorporó a la Ley 19.886 (madre) de bases administrativas para las adquisiciones y prestaciones de servicios para la administración del Estado.
Prosigue: La fiscalía pidió un certificado a la comisión de ética de la Cámara de Diputados en orden a si el diputado Jorge Sabag había pedido permiso para contratar la sede de un pariente; le contestan que no. Están equivocados porque la indicación que comento se refiere a las compras que la Corporación (Cámara de Diputados) realiza con un parlamentario; no a los contratos que hagan parlamentarios con sus asignaciones de libre disposición, recalca. “Están meando fuera del tiesto. No han leído la ley”.
Y añade: Tengo un certificado que dio el secretario general del Senado en que dice que “no existe disposición alguna -ni legal ni reglamentaria- para que los parlamentarios, en este caso senadores, puedan hacer contratos con sus parientes con sus asignaciones de libre disposición. La ley 19.886 es para las compras que la Corporación hace con los fondos institucionales, no con las asignaciones de cada parlamentario. Puede que a la gente no le guste, pero así es la ley”.
Es un poder del Estado que requiere de la autonomía e independencia para poder hacer las leyes y que nadie nos esté atacando por una u otra cosa.
Al cierre de esta edición, el Ministerio Público de Valparaíso estaba pensando en pedir el desafuero de Jorge Sabag ante la Corte de Apelaciones de Concepción. Aunque el tribunal de alzada (4 de octubre 2010) rechazó sobreseer el caso en fallo dividido, estimó que el ilícito indagado por la Fiscalía podría no existir. De manera más precisa, el tribunal sentenció que “los hechos que se le atribuyen al imputado Jorge Sabag no serían, hasta ahora, típicos por lo que no resulta razonable, dada su complejidad y controversia, decretar en el estado en que se encuentra la presente investigación el sobreseimiento definitivo”.
Por “un asunto de honor”, el imputado hizo saber que no llegará a ningún acuerdo reparatorio con el MP y esperará a que la Corte de Concepción se pronuncie sobre el fondo del asunto cuando se pida su desafuero.
El sheik en palabras
¿Cabrero le quedó chico? No, no, no. Con mi señora vamos y volvemos
Lo mejor de su trabajo: Dedicación para apoyar el desarrollo de mi país.
En tres palabras, ¿cómo es usted? Un hombre serio, responsable y consecuente con mi pensamiento e historia.
Su mayor logro: Servir con honradez, dedicación y amor por la gente.
Su peor caída: Muchas, no sé cuál es la peor, pero somos humanos.
Peor insulto que podría recibir: Que busco ventajas al servir y trabajar por la gente.
Interés mediático: No soy mediático. He hecho muchas y grandes cosas y no las cuento. Otros no alcanzan a colocar el huevo y lo han cacareado mil veces. Yo coloco muchos y no los cacareo nunca.
Una virtud que le gustaría tener: Más capacidad de trabajo. Años atrás era incansable, ahora estoy un poco más calmado.
Un defecto: Mala memoria, pero mis amigos dicen que es de elefante.
Un placer culpable: No tengo ambiciones, soy realista.
Un pecado original: …… (se queda en silencio y ríe bajito).