Estrés, ansiedad y dolencias físicas persistentes son parte del precio que muchas personas pagan por su trabajo. Frente a esta realidad, la Sochimef propone repensar el bienestar laboral como un derecho y una responsabilidad colectiva.
FUENTE: Sochimef
En el Día del Trabajo, la Sociedad Chilena de Medicina Familiar (Sochimef) llamó a reforzar la prevención de enfermedades profesionales, entre las que destacan los trastornos de salud mental, los musculoesqueléticos y los respiratorios.
Ello, porque según el último informe de la Superintendencia de Seguridad Social (SUSESO), los trastornos de salud mental y del comportamiento fueron el grupo de enfermedades profesionales más reportado en Chile, representando el 72 % del total. Le siguieron los musculoesqueléticos, que concentraron el 16 % de las denuncias. Estas cifras evidencian que el bienestar emocional y físico en el trabajo continúa siendo un desafío central.
El informe también menciona otras categorías de enfermedades profesionales, como las respiratorias, dermatológicas, audiológicas y diversas patologías asociadas a la exposición en el ambiente laboral.
Desde la Sochimef enfatizan que muchas de estas tienen su origen en factores prevenibles, tales como el estrés laboral crónico, las malas posturas, la sobrecarga física, la exposición a ambientes contaminados y la falta de medidas de protección adecuadas.
Salud mental en el trabajo
Los altos niveles de estrés, la sobrecarga de trabajo, la falta de reconocimiento y los ambientes poco saludables son factores que incrementan el riesgo de desarrollar trastornos psicológicos.
Para Roxana Sepúlveda, médico de familia y presidenta de la Sochimef, la prevención es clave para evitar estas enfermedades. “El trabajo ocupa gran parte de nuestras vidas, pero no podemos hacerlo a costa de nuestra salud. Necesitamos darnos tiempo para descansar, compartir con otros, disfrutar y, también, para escucharnos. Ese equilibrio es clave para no terminar agotadas o enfermos”, explica.
Agrega que todos necesitamos sentirnos valorados en el trabajo. Y por eso, dice, incluir pausas, promover un trato respetuoso y reconocer lo que cada persona aporta hace una gran diferencia. Por ejemplo, “cuando adaptamos los espacios para quienes piensan o funcionan distinto -como las personas neurodivergentes-, no solo los cuidamos a ellas: cuidamos la salud y el bienestar de todo el equipo”, agrega la especialista.
La otra carga laboral
Los trastornos musculoesqueléticos representan la segunda causa más frecuente de enfermedades profesionales en Chile. Afectan principalmente músculos, tendones, ligamentos, nervios y estructuras óseas, y suelen estar asociadas a movimientos repetitivos, manipulación de cargas, posturas forzadas o tiempos prolongados en posiciones estáticas.
Para la doctora Sepúlveda, la prevención de estos trastornos debe formar parte de la cultura organizacional. “A veces no nos damos cuenta, pero trabajar muchas horas en la misma postura o haciendo esfuerzos repetidos puede terminar pasándonos la cuenta. Escuchar al cuerpo, movernos con frecuencia y adaptar el lugar donde trabajamos ayuda a prevenir molestias que, si no se cuidan a tiempo, pueden convertirse en lesiones duraderas”, indica.
La salud en el trabajo no es un lujo: “Es una inversión que nos beneficia a todos como sociedad”, finaliza la presidenta de Sochimef.