Clínica Los Andes: Aliados contra la hipertensión arterial

/ 23 de Septiembre de 2008

Más de 2 millones de chilenos son hipertensos, sin embargo, se estima que el 30% de la población también lo es, pero lo desconoce. El riesgo de desarrollar alguna enfermedad cardiovascular – principal causa de muerte en Chile – es el mayor peligro a que se exponen las personas y en Clínica Los Andes están abiertos a combatir esta enfermedad.
La hipertensión arterial es la antesala al desarrollo de enfermedades cardiovasculares y éstas, a su vez, son la principal causa de muerte en los chilenos. Muchos especialistas la definen como un enemigo silencioso porque es una enfermedad que sólo puede ser diagnosticada con controles y mediciones periódicas. En Chile, más de 2 millones de personas son hipertensas. Se supone que un 30% de la población también lo es, pero no lo sabe y, por lo tanto, no se controla.
Esta realidad mantiene en alerta a los médicos de la unidad de cardiología de Clínica Los Andes. El doctor Carlos Domínguez, explica que “ésta es una enfermedad crónica y que, por lo tanto, no puede curarse”. Sin embargo, es enfático al señalar la importancia de informarse y controlar esta condición mediante tratamientos antihipertensivos adoptados por un especialista.

Más presión en las arterias

La hipertensión arterial se define como el aumento de la presión arterial por sobre los valores determinados como normales (130/85). Para entender este concepto, hay que recordar que es el corazón el que bombea sangre a través de una red de arterias, venas y capilares. La sangre en movimiento empuja contra las paredes de las arterias, fuerza que se mide como presión arterial. Ésta se mide con dos números: la presión sistólica (el número más alto) es la que se produce en las arterias cuando el corazón se contrae; y la presión diastólica (el número más bajo), que se registra en el descanso entre latidos.
La presión arterial normal -según la norma Europea- consta de 4 categorías. La óptima (menor de 120/80); la normal (menor de 130/85); la normal alta (entre 130-139/85-59); y la hipertensión (mayor o igual de 140/90). “La presión arterial varía según la actividad y la edad, pero un adulto sano en reposo generalmente tiene una presión sistólica inferior a 120 y una presión diastólica menor de 80”, sostiene el especialista de Clínica Los Andes.

Hábitos y control arterial

Por lo general, no hay una sola causa en el desarrollo de la enfermedad. Factores hereditarios, ambientales, dietéticos, entre otros, son algunos de los responsables. Pero lejos de determinar el origen, las personas deben priorizar la pesquisa, su control y tratamiento.
“Todo adulto mayor de 40 años debe medir periódicamente su presión arterial, especialmente si sus padres o abuelos han sido hipertensos”, recomienda el doctor Domínguez. Agrega que es fundamental evitar la obesidad y el estrés. Al contrario, recomienda una vida activa basada en el ejercicio físico de, al menos, dos veces por semana por 30 a 40 minutos. Si se adquiere este hábito, no sólo controlará su peso y mantendrá los niveles de presión arterial bajos. También le ayudará a relajarse.
Más información en Clínica Los Andes. Dr. Genaro Reyes #581, Los Ángeles, teléfono (43)210200.

O’Higgins 680, 4° piso, Oficina 401, Concepción, Región del Biobío, Chile.
Teléfono: (41) 2861577.

SÍGUENOS EN NUESTRAS REDES SOCIALES