Profesionales con una sólida educación en ciencias básicas, pero formados en un proceso que integra desde los primeros años el conocimiento de la especialidad es la propuesta de la carrera de Obstetricia de la Universidad Andrés Bello, que el 2014 inicia su segundo año de funcionamiento, período para que el que se ofrecerán cerca de 70 vacantes.
Jorge Cabrera expone que como se trata de una carrera nueva e innovadora permanentemente realizan evaluaciones para medir el aprendizaje de los alumnos. Junto a la matrona Carmen Soto, Directora de la carrera agrega “Estamos utilizando un nuevo modelo educativo con métodos de enseñanza participativos, como seminarios, análisis de casos y juegos de roles donde los estudiantes son los protagonistas del proceso. Para evaluarlos, en algunas asignaturas grabamos en video la participación y la sometemos a un análisis, lo que es una forma muy innovadora de trabajar”.
Insiste en que un elemento que diferencia esta carrera de las existentes en otros planteles es el sello humanista de su currículo, que incluye asignaturas como Comunicación y Profesionalismo, para preparar a los alumnos para enfocar su trabajo hacia la atención de personas.
El obstetra Dr. Jorge Cabrera Ditzel, director de la Escuela de Obstetricia, explica que la idea de que el plan de estudios integre tempranamente ambas áreas, ciencia básica y la clínica, posibilita incrementar paulatinamente la profundización de los contenidos, además de incorporar salidas a terreno y seminarios de investigación. Por ello los estudiantes participan en prácticas de observación de partos y cesáreas, y en el trabajo de atención primaria en los Cesfam, lo que les permite interiorizarse sobre su campo laboral, además de ser una herramienta que reafirma su vocación.
Comenta que aunque la matrícula es mayoritariamente femenina, cerca de un 11 por ciento de los inscritos este primer año son varones. “Creemos que el próximo año se producirá un fenómeno similar, pues ésta no es una carrera sólo para mujeres”, aclara.
Afirma que el campo laboral de esta carrera en Chile es muy amplio, pues se ha reconocido la necesidad de incorporar a estos profesionales a equipos de trabajo interdisciplinarios. Hoy el desempeño de los matrones no sólo es recomendable y deseable en el cuidado de la embarazada, del recién nacido, en programas de control de natalidad, en la prevención y educación sexual, climaterio, cáncer cérvico uterino, sino que también se reconoce, desde el Ministerio de Salud, la pertinencia de su participación en temas de Infertilidad.
Como una manera de entregar nuevas oportunidades de especialización a sus estudiantes y a los profesionales del área, a partir del segundo semestre del 2014, la UNAB pondrá en marcha un Magíster en Climaterio, que estará orientado especialmente a las funciones de profesionales que se desarrollan en la atención primaria.