Diez fueron los cursos desarrollados en esta iniciativa y que abordaron oficios como: guardias de seguridad privada, confección de prendas deportivas, corte y confección de muebles e instalación de cañerías y artefactos sanitarios, entre otros.
Reducir las brechas de inequidad social y abrir nuevas puertas para su desarrollo fue el objetivo del proceso formativo que vivieron 200 mujeres, en situación de vulnerabilidad social, de las comunas de Talcahuano, Hualpén, Chiguayante, Hualqui, Concepción, Penco, Coronel, San Pedro de la Paz y Santa Juana.
Es así que autoridades regionales, ejecutivos de ENAP, alumnas y familiares de éstas, se dieron cita el 15 de noviembre, en el Salón Mural de la Intendencia Regional del Biobío, para culminar su intenso Programa de Capacitación, ejecutado gracias a un esfuerzo público- privado que congregó a ENAP, Fundación PROdeMU y Sence.
Paola Velásquez, gerente de Recursos Humanos de ENAP Refinerías, recordó que el apoyo de la empresa en iniciativas de capacitación no es nuevo en la compañía y obedece a la política de Responsabilidad Social de ENAP.
“En ENAP creemos que ésta es una forma efectiva y real de entregar herramientas a los hombres y mujeres de nuestra Región, que les permitan mejorar su calidad de vida y la de su grupo familiar. Sólo en los últimos tres años hemos capacitado a más de dos mil personas y, además, hemos participado en programas de impacto regional como el de reconversión a ex trabajadores de Paneles Arauco y el programa Pasos de Mujer en la Reconstrucción, ejecutado junto a PROdeMU tras el terremoto”, subrayó.
Contentas con el resultado
Diez fueron los cursos desarrollados durante el segundo semestre de este año, que culminaron a fines de octubre y que abordaron oficios como: guardias de seguridad privada, confección de prendas deportivas, corte y confección de muebles e instalación de cañerías y artefactos sanitarios, entre otros.
Patricia Montanares, alumna del curso de Técnicas de coloración del cabello, expresó: “Venimos de distintos lugares de la provincia y tenemos historias distintas, pero todas traíamos una meta clara: mejorar nuestra calidad de vida, formándonos en un oficio para optar a un mejor trabajo. Nosotras somos un aporte muy importante para nuestras familias, por lo que agradecemos esta capacitación”.
Premio RSE Sence
La ejecución de este programa con PROdeMU incidió a la hora de que el Sence distinguiera, por segundo año consecutivo, con el Premio Responsabilidad Social Empresarial, a Refinería Bío Bío, por su aporte a la capacitación de hombres y mujeres de distintas comunas de la Octava Región.
Rodolfo Zaror, Director Regional del Sence, destacó que “con estos programas queda claramente de manifiesto el rol que está tomando ENAP dentro de las empresas de la Región. Fueron cientos de mujeres las que recibieron su certificación y, en muchos casos, en actividades que son de salida independiente, lo cual les permite generar un pequeño emprendimiento”, precisó.