La presencia de áreas verdes, servicios que posibiliten acceder a distintos productos sin necesidad de trasladarse al centro de la ciudad, sistemas de eficiencia energética, conectividad y la presencia de equipamiento acorde con sus requerimientos son hoy aspectos fundamentales para los actuales compradores de inmuebles.
Los tiempos han cambiado, y los potenciales compradores del mercado inmobiliario se plantean nuevos requerimientos a la hora de adquirir una vivienda. Si bien la ubicación, además del precio, siguen siendo factores determinantes para la decisión de compra, hoy también el equipamiento que posea el inmueble, el entorno donde está emplazado y la conectividad que permite son importantes factores que considerar.
Así lo señala Claudio Lanas, Gerente Inmobiliario de Valmar: “Hoy nos encontramos con consumidores que consideran nuevos aspectos al momento de pensar en adquirir una casa o departamento”.
Afirma que, en su experiencia, los compradores son mayoritariamente personas de entre 30 y 45 años, familias que están formando sus hogares o que ya tienen niños y buscan una vivienda definitiva. Para ellos es fundamental la conectividad, tener accesos expeditos al centro, a sus lugares de trabajo, a los colegios de sus hijos, o tránsito de locomoción colectiva cerca, en caso de que alguno no viaje en auto.
“Si bien el tema del financiamiento o la ubicación siguen siendo fundamentales, hoy también ha cobrado gran importancia la idea de que el lugar donde esté emplazada mi vivienda cuente con servicios y áreas verdes en un radio cercano, lo que permitirá hacer más fácil y grata mi vida, y pasar mayor tiempo con mi familia. Para los consumidores es fundamental, por ejemplo, que existan espacios en las que puedan practicar deportes después del trabajo o los fines de semana, donde pasear a sus mascotas, o donde sus niños puedan jugar o andar en bicicleta”, comenta el directivo.
Así, el mercado da cuenta de que la existencia de zonas de esparcimiento próximas al lugar en que se vive es un factor que impacta directamente en la decisión de compra, pues -más allá de si el inmueble es grande o pequeño-, los nuevos consumidores requieren un lugar cercano donde poder pasear o recrearse fuera de las paredes de su vivienda. Por ello, hoy las empresas constructoras a la hora de elaborar un proyecto se preocupan de incorporar áreas verdes, o de ubicarlos cerca de alguna, un lugar donde el comprador y su familia puedan disfrutar de momentos de recreación al aire libre, un entorno amigable, con plazas donde sentarse a leer un libro o donde los niños puedan jugar fuera de casa, o senderos en los que sea agradable salir a trotar o a practicar algún deporte.
Servicios cercanos y eficiencia energética
Otro aspecto considerado hoy por los compradores es que el barrio en que se emplaza su vivienda cuente con servicios, al menos aquellos que le permitan satisfacer sus necesidades mínimas sin alejarse demasiado de su hogar, como supermercados, farmacias, oficinas bancarias, librerías, strip centers o centros de recreación. Se trata de un factor fundamental si consideramos el agitado ritmo de vida de hoy, con escaso tiempo libre provocado por largas jornadas de trabajo o de colegio. “El tiempo de ocio de las personas es cada vez menor, por lo que necesita imperiosamente poder contar con este tipo de servicios cerca de su casa, para no tener que ir hasta el centro de la ciudad a comprar ciertos productos o satisfacer ciertas necesidades”, señala Lanas.
El tema también cobra relevancia debido a la declaración del Ministerio de Medio Ambiente de Zona Saturada en todo el Gran Concepción, debido a su alta concentración diaria de material particulado fino respirable mp 2,5. Así, hoy que existe mayor conciencia ambiental, el contar con servicios cerca de su casa implica que las familias puedan acceder a ellos caminando, sin necesidad de mover su vehículo, a sabiendas de que eso contribuiría a generar mayor contaminación en el Concepción Metropolitano.
En este sentido, otro tema que preocupa a los futuros compradores es que su nueva vivienda posea sistemas de eficiencia energética, lo que, en la práctica, involucra desde tener una temperatura más agradable en su casa o departamento, pasando por el tema medioambiental, hasta pagar menos en las cuentas de electricidad o gas. Es decir, vivir de manera más cómoda sin que eso implique invertir fuertes sumas de dinero en implementar sistemas de calefacción alternativa, por ejemplo.
Esta mejora cualitativa, que actualmente no implica un aumento significativo del valor de compra de un bien inmueble, se logra gracias a innovadores revestimientos y a la incorporación de ventanas de PVC o de cristales termopanel, que ofrecen un comportamiento térmico óptimo, manteniendo el calor dentro de la vivienda, una temperatura constante que posibilita un mayor grado de confort para sus habitantes. La incorporación de estos materiales implica, además, un menor gasto en calefacción o aire acondicionado, a la vez que impide en mayor medida el paso de la lluvia y el viento, así como también permite vivir ajeno a los ruidos del exterior gracias a la aislación acústica de la que proveen.
Equipamiento anexo
Muchos de los compradores también consideran, a la hora de adquirir un departamento, por ejemplo, la existencia de equipamiento anexo en sus edificios, como club house o sala de eventos, lugar que les permite desarrollar de manera privada sus celebraciones sin alejarse de su hogar, y lavandería, sobre todo en caso de unidades pequeñas que no permiten instalar una lavadora en su interior. “El mercado hoy en día ofrece una amplia variedad de atractivas alternativas en cuanto a estos espacios: gimnasio, piscina, quincho, ascensor, incluso hay algún edificio en Concepción que ofrece zonas de meditación. En todo caso hay que considerar que muchos de estos equipamientos afectan no sólo el precio de compra del inmueble, sino también el costo de los gastos comunes, como en el caso de la existencia de una piscina, que requiere un mayor gasto de agua, mantención, etc. La idea es brindar opciones que le aporten valor al cliente, pero que no le involucren un encarecimiento de los costos. Por ello, hay que analizar muy bien a qué segmento está orientado cada proyecto”.
Plusvalía de la vivienda
No hay que perder de vista que comprar un bien raíz también puede representar una buena inversión, si se toma como tal, una decisión de compra que posibilita conformar un patrimonio, y que presenta altos réditos con muy pocos riesgos. De hecho, invertir en bienes raíces es reconocida como una de las actividades comerciales más rentables hoy por hoy.
En este sentido, ya sea que decida comprar una vivienda para habitarla o que tome su adquisición como una inversión, un importante aspecto que considerar al momento de adquirirla es su plusvalía, entendida como el incremento de su valor a través del tiempo.
La plusvalía se calcula basándose en factores como su ubicación, es decir, cuál es el entorno de donde está emplazado el inmueble (colegios, universidades, servicios, tiendas o áreas verdes cercanas, o si se ubica en la playa o en pleno centro urbano); accesibilidad, que se refiere a la cantidad y calidad de vías de acceso para trasladarse desde y hacia la vivienda, así como una nutrida oferta de locomoción colectiva que pase cerca de su hogar; infraestructura propia, analizando si cuenta con servicios básicos, como agua potable, electricidad o alumbrado público (básicamente para sectores rurales), y aspectos urbanos, ítem en el que juegan un papel fundamental las nuevas vías, autopistas o centros comerciales que se construirán en un futuro cercano en el sector y que, obviamente, aumentarán la plusvalía de la vivienda.
De este modo, hoy en día, la compra de un bien raíz es una decisión que se basa en múltiples factores. Los nuevos consumidores ya no sólo consideran la ubicación de la propiedad al momento de adquirirla, sino que buscan que habitar en determinada vivienda se convierta en una grata experiencia de vida, además de una buena inversión, para quienes residen en ella.