La Arquitectura es un ámbito complejo y apasionante, es el arte de construir obras a partir de un proceso de observación y diagnóstico, de propuestas, para concluir en proyectos definidos a partir de un contexto socio-cultural y de un territorio. Somos observadores y sensibles a las particularidades, lo que nos permite reinterpretar nuestro entorno. Como el músico que al componer transforma el sonido en armonías, estudiamos la anatomía de la obra y componemos nuevos lugares o espacios habitables. La suma de los mismos y sus complejidades constituyen nuestros barrios y ciudades.
Más que una profesión, es una forma de comprender el mundo que nos rodea. Nos permite detenernos frente a distintas realidades, profundizar en diversos temas, resolver y mejorar la calidad de vida de la población. Comprender cómo el territorio, su clima y particularidades definen comportamientos humanos y formas de habitar un lugar es vital, ya que a partir de esas sutilezas y basados en estrategias de diseño exploramos las operaciones espaciales, plásticas y materiales para resolver un problema de arquitectura.
Frente a una misma problemática, cada arquitecto toma una posición única tras el estudio de diferentes soluciones posibles. Ahí residen el encanto, pasión y vehemencia que nos mueven como creadores de nuevas realidades.
Hoy más que nunca se requiere de profesionales dinámicos, flexibles y capaces de formularse las preguntas correctas sobre los problemas cotidianos. Uno de nuestros desafíos es equilibrar la globalización versus la identidad local sobre todo en un país que introduce y absorbe fácilmente agentes externos sin mayor cuestionamiento.
Por otra parte, pensar en Arquitectura ecológica o sustentable pareciera ser una contradicción si entendemos que cualquier proyecto altera su entorno. Por lo mismo, conocer las posibilidades que nos entregan innovadoras tecnologías, así como estrategias de sistemas pasivos, resulta fundamental. Entender lo que nos es propio y potenciarlo se convierte en nuestra fortaleza. Se trata de alcanzar, a través del diseño arquitectónico, mejores estándares de calidad de vida en las viviendas y el espacio.
Como Escuela de Arquitectura de la Universidad San Sebastián tenemos como desafío la generación de propuestas innovadoras así como la valoración de nuestro patrimonio arquitectónico y del paisaje. Son temáticas debatidas de forma permanente por estudiantes y docentes en las tres sedes, Concepción, Puerto Montt y Santiago. Cada una recoge, subraya y potencia las problemáticas específicas que ofrece el territorio.
Consideramos que los alumnos deben adquirir técnica, conocimiento y herramientas, pero, sobre todo, la capacidad de ser integradores, reflexivos, coherentes y conscientes de nuestro rol. Es así que la EA USS obtuvo su acreditación por cuatro años, lo que es coherente con su proyecto, que ha logrado posicionarse como referente y consolidarse por el prestigio de su calidad académica gracias a un modelo audaz, innovador e integrador de la disciplina.
Soledad Garay Pita
Directora de Arquitectura
Universidad San Sebastián