Un profesional que sepa desempeñarse exitosamente en estas áreas, sin dejar de lado su formación clínica, es el sello diferenciador establecido por la Universidad Andrés Bello para los futuros egresados de la carrera de Nutrición y Dietética que imparte la sede Concepción- Talcahuano desde el 2010.
El creciente número de obesos en el país, los problemas nutricionales que aquejan a las personas con enfermedades crónicas y un aumento en el interés por comer sano hacen más frecuentes las visitas al especialista en nutrición. Sin embargo, hoy la labor de estos profesionales no se limita a la consulta clínica, a la creación de dietas o a la administración de servicios de alimentación, sino que su campo se ha ido abriendo a nuevos ámbitos y responsabilidades que, a su vez, requieren de una adecuada formación.
Consciente de la necesidad de adecuar la preparación de sus futuros nutricionistas a las necesidades que hoy presenta esta profesión, la Universidad Andrés Bello, según explica la directora de la carrera, Mabel Garrido Vidal, incorporó las áreas de gestión y calidad como ejes fundamentales de su programa de pregado.
“Nuestra malla está orientada a preparar nutricionistas que se puedan desempeñar en áreas diversas como administración en servicios públicos, autogestión de la consulta privada, servicio de alimentación de empresas y casinos, y también en la programación de nuevos modelos de estilos de alimentación y así como en la administración de recursos públicos y privados, porque hasta hoy muchos profesionales realizan estas tareas de manera intuitiva. Por ello nuestro programa va enfocado a entregar otras herramientas que permitan al profesional nutricionista desempeñarse en áreas que hasta hace unos años eran ajenas a la profesión e incluso en el diseño de proyectos propios”, explicó Mabel Garrido.
La carrera de Nutrición y Dietética en la sede Concepción-Talcahuano de la U. Andrés Bello tiene una duración de 10 semestres. Su admisión es para 60 vacantes a través de la Prueba de Selección Universitaria. “Nosotros estamos formando profesionales con un respaldo académico muy fuerte, pues contamos con un cuerpo docente de excelencia y que tiene mucha experiencia en la tarea profesional y académica. Adicionalmente, y tomando en cuenta el sello de nuestro programa, a las tradicionales áreas de la salud pública, la clínica y la administración de servicios de alimentación, incorporamos asignaturas ligadas al marketing, al liderazgo, a la gestión y a la evaluación de proyectos”.
Y añade: “Hoy en Chile hay un 9.5 por ciento de menores de seis años obesos, para quienes se deben crear nuevas leyes y nuevas fórmulas que ataquen este serio problema, y los nutricionistas debemos estar preparados para ello. Se encuentra claramente evidenciado que es posible Prevenir, Tratar y Rehabilitar a través de la alimentación. Es preciso, por ello, saber gestionar y administrar los recursos para generar la mejor estrategia que permita actuar de forma más certera en la prevención de esta enfermedad que aqueja tanto a la población adulta como a los adultos del mañana”, afirma.
Respecto de la malla de la carrera, explica que en los primeros años el énfasis está dado en las ciencias básicas y que poco a poco se introducen asignaturas de la profesión. “Así como hemos incluido el inglés en toda la carrera, también hemos incorporado de manera transversal a los programas la gestión, incluso cuando en quinto año los alumnos realizan el internado, se ha incluido un internado en gestión y un internado rural, además de los de clínica pediátrica y adultos, alimentación colectiva y atención primaria”, apunta.