Orgullosos están en el Hospital Clínico del Sur con su Acreditación otorgada por la Superintendencia de Salud, al cumplir con las exigencias en calidad de atención a sus pacientes, proceso que involucró a todos sus trabajadores.
Considerar al paciente el centro de su quehacer motivó al Hospital Clínico del Sur (HCS) a someterse a una evaluación externa que los llevó, posteriormente, a ser merecedores de la acreditación por tres años en sus Procesos de Atención de Salud. Dicho reconocimiento, otorgado por la Superintendencia del ramo, no sólo respalda el trabajo del HCS, sino que brinda a sus pacientes garantías de calidad en la atención recibida en el centro de salud.
Maribel Raddatz, enfermera coordinadora del Servicio de Hospitalización Médico Quirúrgico, explica cómo se desarrolló esta instancia: “En septiembre comenzamos el proceso de evaluación, realizado por una empresa externa, el que se gestionó con las enfermeras coordinadoras que somos quienes llevamos los planes de calidad de los servicios. Evaluaron, revisaron nuestra información, cotejaron que las pautas que hemos hecho sean un reflejo de la realidad, nos auditaron las fichas, y tuvimos entrevistas y pruebas, fue un trabajo muy acucioso”.
Agrega que el HCS venía preparándose para este proceso desde hace dos años, como parte de sus planes de mejora de la calidad y que, antes de ser evaluados por la Superintendencia, realizaron una auditoría interna para revisar los procesos y reorganizarlos de mejor forma. Así, los últimos seis meses se enfocaron en la evaluación del organismo gubernamental, para lo que las enfermeras coordinadoras tuvieron la misión de concientizar y replicar al resto de los equipos el verdadero trasfondo de estos cambios: mejorar la calidad de atención a los pacientes. “La certificación no sólo significa ser reconocido como centro de salud de alta calidad en atención a sus pacientes, sino que conlleva una nueva metodología de trabajo, que implica mejorar continuamente los distintos procesos, mejora que debe mantenerse a largo plazo, porque en tres años queremos acreditarnos nuevamente”, señala.
Además de las evaluaciones al personal, la opinión de los pacientes fue considerada en distintas encuestas de calidad realizadas periódicamente, y que “son el mejor reflejo de la atención recibida. Por ello, el paciente siempre vuelve, pues nota nuestro compromiso y la atención integral que les brindamos”, afirma Romina Burgos, técnico en Enfermería del Servicio de Urgencia.
Por su parte, Cecilia González, enfermera de la UCI, indica que esta acreditación significa un gran logro para el HCS y para el personal. “Como profesionales nos sentimos orgullosos, somos como una familia que dio un gran paso”, comenta, destacando que si bien el proceso implicó más que nada reorganizar el trabajo, fue necesaria una cuota extra de paciencia y dedicación para que el resto del personal y los médicos contarán con la información necesaria para responder a los evaluadores. “Considero que los pacientes y sus familias perciben que hay preocupación por ellos, creo que se sienten seguros con nosotros”.