Desarrollar nuevas obras de infraestructura en un colegio es, sin lugar a dudas, el sueño y desafío permanente que tienen los directorios, pero para nuestro colegio -Kingstone College- estos proyectos revisten aún mayor complejidad, dada nuestra condición de corporación educativa sin fines de lucro.
Para explicarlo de manera simple diremos que todos los padres y apoderados del colegio somos dueños de él, y nos regimos por estatutos. A la vez, cada presidente de curso es integrante del directorio, el cual es representado por una directiva, encabezada por el Presidente de la Corporación, cargo que me ha correspondido encabezar durante este 2015.
En cuanto al desarrollo de nuestros anhelados sueños de crecimiento, hemos logrado concretar durante estos últimos años importantes hitos como, por ejemplo, los campos deportivos, que hoy ofrecen a nuestros alumnos los espacios necesarios para el desarrollo de sus actividades deportivas, para importantes torneos y encuentros interescolares. Otro beneficio adicional que ha otorgado este campo deportivo es su contribución al hermoseamiento del paisaje del Barrio Lomas de San Sebastián, brindando una imagen perfecta de prácticas de vida sana y permanente convivencia.
Durante 2014 y 2015, hemos dado inicio al plan de obras más importante de los últimos años, logrando, así, dar inicio y pronto término a espacios que permitirán un sano desarrollo de nuestros alumnos. Dentro de estos hitos podemos mencionar la nueva sala multiuso, un nuevo casino que albergará a cerca de 350 alumnos, un nuevo gimnasio que se conectará con el que existe actualmente, un paso techado que entregará una conectividad segura a nuestros alumnos, y una serie de otras obras que nos permitirán comenzar el 2016 con un rostro totalmente renovado.
De esta manera, durante agosto de este año realizamos la ceremonia de Primera Piedra en nuestro colegio, actividad que contó con la presencia y representación de todos los sectores de Kingstone College: Directorio, rectoría, docentes, Centro de Alumnos, administrativos, personal de servicios y, por supuesto, nuestros alumnos. Además, como una forma de plasmar este importante momento, se exhibió y enterró una Cápsula del Tiempo, en la que se guardaron diversos elementos, como dibujos de los niños, implementos del colegio y mensajes, entre otras cosas, a la espera de rescatarlas en veinte años más para que los alumnos de ese entonces las observen.
Mientras tanto, seguimos trabajando cada día para alcanzar el bienestar constante de nuestros alumnos y apoderados.
Claudio Álvarez, Presidente
Corporación Kingstone College.