Tres meses debió cerrar sus puertas el Teatro UdeC para concretar su gran transformación. Pero valió la pena pues, ahora, los asistentes a su nutrida agenda artístico-cultural podrán disfrutar plenamente, y con mayor comodidad, cada uno de sus espectáculos.
Por Cyntia Font de la Vall P.
El 7 de abril, el Teatro Universidad de Concepción reinaguró sus dependencias de la mano del primer concierto sinfónico de la Temporada 2017. Y lo hizo en grande, haciendo gala de una sala completamente renovada. “La remodelación del Teatro, la mayor que ha vivido desde sus inicios, representó una inversión de más de $ 300 millones por parte de la Universidad. Fue una transformación profunda, que abarcó más de lo que en un primer instante se planeó”, cuenta Lilian Quezada, Gerente de Corcudec.
Algo que es fácil comprobar al recorrer las instalaciones. Al entrar en el foillé es imposible no notar sus recién estrenadas alfombras, y deleitarse caminando por ellas, sintiendo su mullida textura, la que permite, ya dentro de la sala, gracias a su especial densidad, lograr un óptimo efecto acústico.
Asimismo, ahora reciben al visitante gigantografías que narran la destacada e ininterrumpida trayectoria de este espacio, hogar de la Orquesta Sinfónica universitaria, a la vez que sede de innumerables actividades artísticas, culturales y sociales de toda la comunidad.
Sin embargo, junto con los relucientes nuevos pisos, es una antigua lámpara, vestigio del primer teatro universitario, lo que se erige en gloria y majestad a la entrada del recinto, dando la bienvenida a sus visitantes como un símbolo de lo que este espacio representa desde sus inicios: un ícono del desarrollo cultural de la Región.
“Como Universidad, hace tiempo teníamos la intención de mejorar y modernizar este espacio que congrega a miles de espectadores cada año, algo que finalmente sucedió. Hoy, el Teatro muestra una nueva cara, con la totalidad de sus butacas, alfombras, suelos y cielo renovados, trabajo que también implicó la completa renovación de la iluminación de la sala, que hoy se asemeja a un cielo estrellado”.
Entrando en la sala se respira ese “olorcito a nuevo” en todas partes. Sus modernos asientos en ambas plateas, que mantuvieron la línea de las antiguas butacas, hoy son mucho más cómodos, al igual que los asientos del balcón, que se recuperaron por completo.
Los pisos recién pulidos, las paredes pintadas, el brillante color de la madera y su nueva iluminación provocan que el Teatro se vea distinto, incluso más grande. Este efecto óptico, sumado a sus alfombras y a la marcada presencia de madera, también conspiran para la creación de un cambio acústico, generado por una suerte de rebote del sonido, que refuerza la sensación sonora al presenciar un espectáculo.
Esta completa renovación, que se une a la refacción de sus baños, efectuada en 2016, también contempló mejoras en el escenario, escaleras de acceso y salidas de Balcón, donde se incorporaron medidas de seguridad, y también en el foso de la Orquesta, cuyos músicos ahora cuentan con sillas ergonómicas, cuyo respaldo y altura del asiento pueden adaptar para mayor comodidad.
“Esta gran renovación es un aporte de la Universidad para toda la comunidad, pues entiende que se trata de un espacio patrimonial, que debía ser renovado para mantenerse como lo que es: un lugar comunitario donde reunirse y disfrutar del arte”.
Temporada 2017
Con respecto a la Temporada 2017, la parrilla programática mantendrá su línea de brindar espectáculos de calidad, que aporten a la formación de nuevos públicos. Así, este año, se presentarán 10 conciertos sinfónicos; 18 conciertos de difusión, con Violeta Parra Sinfónico en comunas (ya comprometidos), más dos conciertos que se realizarán en el Teatro en septiembre, y cuatro conciertos gratuitos de música de cámara. A esto se suman las tres temporadas educacionales para estudiantes, que este año, con Prima Donna, recorrerán la música de compositores románticos, tanto dentro del Teatro como en otras comunas, y los cinco conciertos de Navidad.
Por su parte, los Lunes Cinematográficos planean ofrecer a lo largo del año más de 80 funciones de 28 destacadas películas, mientras que en Teatro, Corcudec se abocará a la producción de un proyecto con actores locales, que buscará relevar la problemática del segmento juvenil. “Se tratarán temas como las adicciones, el bullyng escolar o el maltrato cibernético. Un proyecto muy interesante y de fuerte contingencia social”. A esto se sumará la presentación de al menos cuatro obras teatrales nacionales, además de aproximadamente una decena de conciertos en asociación con productoras externas.
Agosto será el mes de la ópera, con tres funciones (los días 24, 25 y 26) de Lucía de Lammermoor, de Gaetano Donizetti, en tanto que el 3 y 4 de noviembre se ofrecerán dos presentaciones de un montaje de danza junto al ballet de la UdeC. “Se trata de un proyecto muy entretenido, pues entrelazará las virtudes de este ballet con las de la Orquesta, todo coreografiado con música de compositores clásicos latinoaméricanos”, adelanta.
La “temporada” de Jazz ya abrió de la mano del destacado músico penquista Marlon Romero con la realización del 14° Festival Nacional de Jazz, a lo que se sumarían un par de eventos más durante el año.
“La verdad es que Corcudec no para. Durante todo el año nos mantendremos trabajando, tal como lo hemos hecho siempre, para seguir presentando espectáculos de gran calidad, a los que sabemos el público ya está acostumbrado”, puntualiza Lilian Quezada.